What to Know
- Según funcionarios federales, se han reportado más de 500 enfermedades y al menos siete muertes relacionadas con el vapeo en todo el país.
- El informe del fiscal de la ciudad incluye restricciones que otras ciudades y estados han promulgado para reducir las ventas de dispositivos
- Las autoridades señalaron que la mayoría de las personas enfermedades por el vapeo son menores de 25 años.
El martes, la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles votó por unanimidad su intención de aprobar una prohibición de los productos de tabaco saborizados, incluido el mentol. Docenas de propietarios de negocios de tabaco protestaron, junto con defensores que apoyan el vapeo y los cigarrillos electrónicos como ayuda para dejar de fumar.
La ordenanza debe volver a la junta para una segunda lectura la próxima semana, y entrará en vigor 30 días después de esa segunda votación.
Los minoristas de tabaco tendrían entonces 180 días, bajo una medida propuesta por el supervisor Mark Ridley-Thomas, para obtener nuevas licencias y deshacerse de productos de tabaco con sabor.
Las ventas por internet no estarían prohibidas y los usuarios no serían castigados bajo la ordenanza, según Judy Whitehurst, abogada asistente del condado.
La directora del Departamento de Salud Pública, Bárbara Ferrer, dijo a la junta que los productos de tabaco con sabor "están impulsando la epidemia actual de vapeo entre los jóvenes" y alentando la experimentación, que puede llevar a una adicción de por vida.
"No creas lo que escuchas en las noticias" fue el mensaje de los partidarios de vapear, mientras sostenían carteles que decían: "Vapear salva vidas".
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"Traté parches, Chantex, pastillas, chicle, nada me funcionó", dijo Kelly Collett, quien dejó de fumar después de 22 años gracias al vapeo.
Los funcionarios de salud del condado estaban haciendo el caso contrario dentro de la reunión de la Junta de Supervisores, argumentando a favor de la prohibición de los productos de tabaco saborizados que han hecho que el vapeo sea extremadamente popular.
Sin embargo, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades señalan que el vapeo ha contribuido a más de 500 enfermedades y ocho muertes en todo el país, la mayoría jóvenes.
"Quiero ponerle fin a la venta porque no quiero que tengan una vida de adicción", dijo Katelyn Quezada, quien apoya la prohibición del vapeo.
Pero los opositores dicen que les corresponde a los padres educar a sus hijos sobre el vapeo, y que una prohibición no sólo perjudicaría a los exfumadores, sino que llevaría a la quiebra a los dueños de tiendas de tabaco.
"[Es] una idea horrible prohibir esto", dijo A Kouture, fundador de la International Black Restaurant & Hospitality Association.
Kouture señaló que el gobierno no prohibió a McDonald’s por preocupaciones sobre la salud de los niños, ni prohibió el alcohol saborizado por las preocupaciones sobre el consumo de alcohol entre adolescentes, y advirtió que la prohibición le va a echar leña a un mercado negro.
Muchos oradores pidieron que la junta establezca una exención cultural para el uso del narguile, y argumentaron que también era demasiado aparatoso para ser popular entre los niños.
Pero Ferrer dijo que el dos por ciento de los estudiantes de secundaria, y el cuatro por ciento de los adultos jóvenes encuestados por su departamento, habían usado narguiles el mes anterior. Enfatizó que la ordenanza no prohibiría el uso de narguiles, solo el uso de sabores.
"Lo que estamos pidiendo es prohibir la venta de sabores que enmascaran la dureza de los productos de tabaco", dijo Ferrer.
La supervisora Kathryn Barger dijo que creía que aproximadamente 700 empresas en áreas no incorporadas se verían afectadas por la ordenanza, y notó confusión sobre los detalles de la ordenanza. Pidió al personal que desarrollara una hoja informativa para las empresas.
Si finalmente se aprueba, la ordenanza requeriría una nueva licencia comercial del condado para los minoristas de tabaco y cigarrillos electrónicos que conlleva una tarifa inicial de 778 dólares y una tarifa adicional de 142 dólares cada dos años después de eso. A las empresas también se les exigiría una licencia de venta minorista de tabaco, incluyendo a las tiendas que sólo venden cigarrillos electrónicos o productos de vapeo, que cuestan 235 dólares por año.
El debate del condado se produjo el mismo día en que el Departamento de Salud Pública del estado anunció un aviso de salud instando a todos a abstenerse de vapear hasta que se puedan completar las investigaciones sobre hospitalizaciones y muertes relacionadas con el vapeo.
Hasta la fecha, unos 90 californianos con antecedentes de vapeo han sido hospitalizados por problemas respiratorios graves y daño pulmonar. Dos de esas personas han muerto.
Aunque aún no se ha identificado una causa específica, la agencia estatal advirtió que cualquier persona que inhale una sustancia extraña corre riesgo de obtener una enfermedad grave y perder la vida.
"El vapeo no es sólo una preocupación para los jóvenes; los casos de vapeo investigados afectan tanto a jóvenes como a adultos", dijo en un comunicado la funcionaria interina de salud pública estatal, la doctora Charity Dean.
Las autoridades instaron a cualquier persona con dificultad para respirar después de vapear a inmediatamente consultar a un médico. También pidieron a los usuarios afectados que no desechen los cartuchos de vapeo usados para permitir que los laboratorios estatales analicen la sustancia restante.
