La temporada ciclónica de 2023, que inició el 1 de junio, ha llegado a su fin, marcando seis meses de incertidumbre meteorológica para regiones afectadas por ciclones y huracanes año tras año.
En este 2023, la temporada comenzó de forma anticipada con la formación inusual de una tormenta subtropical sin nombre en enero, marcando un comienzo precoz y excepcional.
La temporada sorprendió también por su "inesperada actividad" con más del doble de sistemas de los que uno esperaría en el Atlántico en un año marcado por la presencia de El Niño, dijo Hugh Willoughby, profesor del Departamento de Tierra y Medioambiente de la Universidad Internacional de Florida (FIU).
A lo largo de la temporada, se desarrollaron 21 ciclones tropicales en el Atlántico, de ellas 20 tormentas tropicales, 7 huracanes y de ellos 3 fueron de gran intensidad. Es la cuarta temporada con más tormentas con nombre en un año desde 1950, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés).
Entre los ciclones más destacados estuvo el huracán Idalia, que tocó tierra en el norte de Florida como categoría 3 y dejó campos inundados por las marejadas ciclónicas de 7 a 12 pies (2-3,6 metros), cultivos perdidos y enormes pérdidas de producción.
La firma Moody's Analytics calculó en un informe preliminar que los daños y las pérdidas de producción causadas por el huracán en esta región de Florida conocida como "Big Bend" oscilan entre los $12,000 y $20,000 millones.
Además, Estados Unidos recibió el impacto de dos tormentas tropicales: Harold y Ophelia en Texas y en Carolina del Norte y Sur, respectivamente.
Uno de los momentos más notables fue a finales de agosto, cuando se formaron seis ciclones tropicales, incluyendo Emily, Franklin, Gert, y Harold. En un período de 39 horas, cuatro de estas tormentas recibieron nombre, marcando un récord en la historia de la temporada ciclónica.
Además, Franklin afectó la República Dominicana antes de convertirse en un huracán de gran intensidad.
Especialmente llamativo también resultó la ruta que siguieron esta temporada numerosas tormentas tropicales y huracanes, hacia el norte, "mar adentro", eludiendo a menudo, afortunadamente, zonas pobladas, apuntó María Torres, directora del Departamento de Especialistas del Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés).
Explica la experta del NHC que este hecho se debió a que "la cresta de alta presión que normalmente dirige" los sistemas hacia el oeste no fue tan fuerte en 2023, lo que permitió que la mayoría de las tormentas o huracanes que se formaron "giraran hacia el norte y volvieran a curvarse en el Atlántico central u occidental".
La lista de nombres de los ciclones tropicales de 2023 incluyó Arlene, Bret, Cindy, Don, Emily, Franklin, Gert, Harold, Idalia, José, Katia, Lee, Margot, Nigel, Ophelia, Philippe, Rina, Sean, y Tammy, sin que los nombres de Vince y Whitney se llegaran a utilizar.
Estos nombres fueron seleccionados de la misma lista que se utilizó en la temporada de 2017, con las excepciones de Harold, Idalia, Margot y Nigel, que reemplazaron a Harvey, Irma, María y Nate, respectivamente
¿PUEDEN FORMARSE CICLONES FUERA DE TEMPORADA?
En cuanto a la posibilidad de que ocurran fenómenos de este tipo fuera de las fechas de la temporada, la respuesta simple es que sí. Es importante recordar que, aunque la mayoría de los ciclones tropicales se forman dentro del período oficial de la temporada, pueden surgir fuera de estas fechas.
La formación de la tormenta subtropical sin nombre en enero de 2023 es un ejemplo de que estos eventos pueden ocurrir en cualquier momento del año.
¿CÓMO AFECTÓ EL NIÑO?
En teoría, la actividad en la cuenca atlántica se iba a ver influida este año por la aparición del fenómeno meteorológico El Niño en el Pacífico, que suele apaciguar las condiciones que dan pie a la formación de huracanes en el Atlántico.
Pero tanto la NOAAque había vaticinado en mayo pasado una temporada de huracanes "casi normal" en la cuenca atlántica, como la Universidad Estatal de Colorado (CSU), tuvieron que corregir radicalmente su pronóstico a mitad de temporada.
A la vez, "el calor anómalo extremo" registrado en el Atlántico contrarrestó parte de los vientos cortantes típicos provocados por El Niño que, usualmente, inhiben la formación de tormentas en la cuenca atlántica.
"La temperatura récord de la superficie del mar en 2023 (con temperaturas en agosto de 25.19 grados centígrados) permitió que se formaran numerosas tormentas, aunque muchas de ellas no se fortalecieron mucho o fueron de corta duración", dijo Torres, del NHC.
¿QUÉ PASA LUEGO DE ACABAR LA TEMPORADA?
Al concluir una temporada de huracanes, se abre una etapa crucial de análisis y reconstrucción.
Los expertos en meteorología se dedican a estudiar detenidamente los patrones y datos recabados durante la temporada, lo que es fundamental para mejorar las predicciones y estrategias de preparación en el futuro.
Por su parte las comunidades afectadas por los huracanes se concentran en las tareas de reparación y reconstrucción, enfrentando los desafíos que dejan a su paso estos fenómenos, mientras que las diferentes agencias como FEMA concluyen el periodo de solicitud de ayudas.