LOS ÁNGELES - La histórica tormenta invernal y raro aviso de “blizzard” trajo consigo desafíos para miles de personas del sur de California, pero para algunos fue realmente un momento épico.
La familia Wade nunca imaginó que la espera de su segunda hija, se convertiría en una odisea por la cantidad de nieve que cayó en Lake Arrowhead, lugar donde Brady Wade vive con su esposa y su hijo de cuatro años.
El día inició como una jornada normal para Brady, un trabajador estatal. “Estaba en el trabajo el jueves y estábamos quitando la nieve para poder albergar a los trabajadores de emergencia, y llegué a casa alrededor de las 9:30 p.m.”, narró.
Brady dijo que su esposa estaba embarazada y “en ese momento, estábamos en medio de la tormenta. Había alrededor de 3 o 4 pies de nieve en el suelo”.
El hombre llegó a su casa y “mi esposa dice que está teniendo contracciones, así que comencé a cargar el carro, lamentablemente no pude llevar el carro hasta mi casa por las condiciones de las carreteras”.
Brady estaba desesperado tratando de cargar las cosas en el carro que estaba un poco lejos de la casa. Mientras tanto su esposa estaba “teniendo las contracciones cada vez más cerca”, agregó.
Brady se preguntaba cómo iban a llegar hasta el hospital, pues viven en Lake Arrowhead, y su centro médico estaba ubicado en Fontana, ciudad a 51 millas de distancia.
En medio del pánico por la gravedad de la situación, “un amigo mío se enteró de esto, corrió a la casa en medio de la nieve, y ya en ese momento estábamos en condiciones de ventisca (blizzard). Me ayudó a cargar, finalizar y salir. Dejamos a nuestro hijo con ellos en Lake Arrowhead”.
Brady comenzó a conducir en medio de las condiciones de ventisca, con vientos cruzados y nieve constante. “Las condiciones de la carretera eran muy difíciles, mi esposa estaba de parto y todavía estábamos a 50 minutos del hospital”, recordó.
El hombre siguió conduciendo hasta bajar de la montaña. “Tan pronto como bajamos la montaña, comenzamos a pasar las luces rojas y llegamos en muy poco tiempo a Fontana”, dijo Brady.
Cuando llegaron al hospital, la mujer tardó poco en dar a luz. El médico dijo que su esposa estuvo a punto de recibir a la bebé en medio de la carretera. “Afortunadamente eso no sucedió”, dijo Brady con una gran sonrisa.
La bebé llegó y sus padres la llamaron Winter Wade en honor al invierno en el cual nació.
Pero la odisea continuaba. El viernes por la mañana las vías para regresar a casa estaban cerradas.
Brady logró adquirir un permiso de residente para subir la montaña, pero al llegar cerca de su casa, descubrió que no habían limpiado las calles hasta seis bloques antes de su vivienda.
“Así que terminamos dejando el camión a unas cuadras y caminamos con mi esposa sosteniendo a la bebé recién nacida en su chaqueta a través de cuatro pies de nieve, y yo teniendo a mi hijo de 4 años”, dijo Brady.
Ahora la familia está reunida en su casa en Lake Arrowhead, pero no han podido salir pues las vías siguen cerradas. Esperan que Caltrans limpie rápidamente las calles, pues pronto no tendrán comida para alimentar a la familia.
Sin embargo, aseguran estar felices por la llegada de Winter, la bebé que nunca dejará que se olvide esta nevada histórica.