Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) emitieron una alerta de salud pública a los médicos de todo el país, pidiéndoles que estén atentos a casos inusuales de enfermedad hepática grave en niños.
La agencia dijo este jueves en su aviso que nueve casos de hepatitis, o inflamación del hígado, fueron reportados en Alabama en niños de 1 a 6 años, y NBC News informó que se han identificado dos más en Carolina del Norte, según el departamento de salud del estado.
Además, en las últimas semanas se ha informado de docenas de casos en niños de Gran Bretaña y en toda Europa. Los virus habituales que causan la hepatitis infecciosa no se observaron en esos casos, y los científicos y médicos están considerando otras posibles fuentes.
"La hepatitis leve es muy común en los niños después de una variedad de infecciones virales, pero lo que se está viendo en este momento es bastante diferente", dijo Graham Cooke, profesor de enfermedades infecciosas en el Imperial College London.
Algunos de los niños en Reino Unido requirieron atención especializada y varios han necesitado un trasplante de hígado, que es el órgano que procesa los nutrientes, filtra la sangre y combate las infecciones.
Las infecciones causaron síntomas como ictericia, diarrea y dolor abdominal. La hepatitis puede poner en peligro la vida si no se trata.
UN ADENOVIRUS, EL PRINCIPAL SOSPECHOSO DE LA INFECCIÓN
Si bien no está claro qué está causando las enfermedades, el principal sospechoso es un adenovirus.
Hay docenas de adenovirus, muchos de ellos asociados con síntomas similares a los del resfriado, fiebre, dolor de garganta y conjuntivitis. Las autoridades estadounidenses dijeron que los nueve niños de Alabama dieron positivo a adenovirus y que están explorando un vínculo con una versión en particular, el adenovirus 41, que normalmente se asocia con la inflamación intestinal.
El aviso de los CDC del jueves insta a los médicos pediatras a considerar la prueba de adenovirus.
Los funcionarios de salud pública descartaron cualquier vínculo con las vacunas COVID-19 y dijeron que ninguno de los niños afectados fue vacunado.
La OMS señaló que aunque ha habido un aumento de adenovirus en Gran Bretaña, el papel potencial de esos virus en el desencadenamiento de la hepatitis no está claro. La OMS dijo que había menos de cinco casos posibles en Irlanda y tres casos confirmados en España, en niños de 22 meses a 13 años.
La agencia de salud de la ONU dijo que dado el salto en los casos en el último mes y la mayor vigilancia, era "muy probable" que se detectaran más casos.