LOS ÁNGELES, California - El "principal sospechoso" del asesinato de Kristin Smart, la joven universitaria que desapareció sin dejar rastro en Los Ángeles en 1996, fue acusado este miércoles de homicidio e intento de abuso sexual, según el Departamento de Policía de San Luis Obispo.
Paul Flores, de 44 años y quien fue la última persona que fue vista con Kristin Smart antes de que desapareciera, fue detenido el martes en el área de Los Ángeles.
Su padre, Rubén Flores, de 80 años, fue arrestado como cómplice en su casa de Arroyo Grande, donde los investigadores del alguacil realizaron otra búsqueda. Las autoridades creen que el papá del acusado lo ayudó a "deshacerse del cuerpo".
El fiscal del distrito dijo que creen tener la ubicación del lugar donde fue enterrado el cuerpo de Smart, después de 25 años sin saber nada de su paradero.
Las autoridades no han encontrado el cuerpo de Smart, pero dicen haber hallado evidencias relacionadas con su asesinato durante el allanamiento en la casa de Flores y la de sus padres el año pasado.
Rubén Flores, padre del sospechoso y de 80 años, fue fichado bajo sospecha de ser cómplice de un delito grave, según los registros de la cárcel del condado de San Luis Obispo.
¿QUÉ PASÓ CON KRISTIN SMART?
Smart, de 19 años, de Stockton, desapareció en mayo de 1996 mientras regresaba a un dormitorio en la Universidad Estatal Politécnica de California, en San Luis Obispo, después de una fiesta.
La joven californiana fue vista por última vez con Flores, quien era estudiante en ese momento.
El cuerpo de Smart nunca fue encontrado y fue declarada muerta en 2002, seis años después de su desaparición.
Un área cerca del campus donde Smart era estudiante fue excavada en 2016. Sin embargo, no hubo una sola pista sobre el rastro del cuerpo de la joven.
"Saber que un padre y un hijo, a pesar de nuestras desesperadas súplicas de ayuda, podrían haber retenido este horrible secreto durante casi 25 años, negándonos la oportunidad de poner a descansar a nuestra hija, es un dolor implacable e imperdonable", dijo la familia de Smart en un comunicado.
La noticia llega aproximadamente un mes después de que el alguacil nombrara a Flores como el "principal sospechoso" en el caso y los investigadores registraron la casa y la propiedad de su padre utilizando radares de penetración en el suelo y perros.
Los investigadores entregaron otra orden de registro el martes en la casa de Rubén Flores, padre del sospechoso, a unas 15 millas (24 kilómetros) al sur de la universidad en la costa central de California, informó KSBY-TV. Parecían estar desmontando una plataforma fuera de la casa y se podía escuchar el sonido de sierras eléctricas y taladros de fondo.
El año pasado se entregaron órdenes de registro en la casa de Paul Flores en el área de San Pedro de Los Ángeles y en otras ubicaciones en California y el estado de Washington. Los investigadores realizaron excavaciones en el campus en 2016.
Paul Flores se ha mantenido callado a lo largo de los años, invocando su derecho de la Quinta Enmienda a no responder preguntas ante un gran jurado y en una declaración por una demanda que se presentó en su contra.
Fue arrestado en febrero por cargos de armas y puesto en libertad bajo fianza.
This story first appeared on Telemundo 52's sister station, NBCLA. Click here to read this story in English. More from NBCLA: