Dominic Miller pasó más de 10 años en una cárcel del estado. Días después de ser puesto en libertad, se enteró de un programa que capacita para trabajos en carpintería enfocada en la construcción en el condado de Los Ángeles.
“Mi siguiente paso sería aprender de todo”, dice Miller. “Y después, quiero tener mi propio negocio con mi propio equipo de construcción, algún día quiero ser contratista”.
El programa Brothers Keepers es la opción que ha permitido a Miller y a otras personas que han salido de la cárcel a capacitarse para un trabajo que les ofrezca un mejor salario, prestaciones y ser miembro del sindicato de carpinteros.
Los cursos se llevan a cabo por etapas, con clases de cuatro semanas para los principiantes en el condado de Los Ángeles. Una vez que hayan obtenido empleo, pueden continuar su entrenamiento de manera esporádica.
El Centro Regional de Carpinteros del Suroeste, con varias ubicaciones en el sur de California, se encarga de capacitar e integrar al sindicato a los nuevos empleados de la construcción que formarán parte de la vida laboral. Además del programa “Brother’s Keepers”, ofrecen la opción denominada Boots, dedicada a entrenar mujeres.
Dione Bonilla llegó al programa Boots hace 2 años, y la carpintería por medio del sindicato aunque es un trabajo pesado nos comentó que es algo que le ha cambiado y mejorado su vida
California
“Es una oportunidad para las mujeres que no saben mucho de construcción y te puede ayudar mucho para entrar en una compañía”, cuenta Dione Bonilla.
Bonilla tomó varias clases en varios colegios comunitarios buscando una vocación hasta que se dio cuenta que lo suyo era la construcción.
“Siempre he ido al colegio y he estado ahí como 10 años, hasta que la unión [sindicato] vino a la escuela y me agarro ahí”, dice Bonilla.
Las clases son gratuitas para quienes sean elegibles son totalmente gratis. Para obtener más información sobre estos programas, haga clic aquí.