Jefrey Umaña Muñoz es un estudiante indocumentado de UCLA que cursa estudios chicanos, centroamericanos y laborales.
El joven llegó a Estados Unidos a los dos años y, aunque califica para el programa DACA, no tiene la protección.
Umaña Muñoz la solicitó en 2017, año en que la administración del expresidente Donald Trump suspendió el programa. Esto lo dejó desprotegido y pasó a formar parte de un grupo de más de 44,000 estudiantes universitarios de California descalificados del programa DACA
“Una orden después congeló todas las aplicaciones, es lo que ha pasado con mi caso", cuenta Umaña Muñoz.
Esta circunstancia le impide al joven trabajar legalmente para ayudarse a pagar sus estudios.
“Sigo siendo dependiente de mi papá él también apoya y aporta para mis estudios”, dijo Umaña Muñoz, quien completa con becas la ayuda que le proporciona su padre.
California
Pero una medida aprobada por la Junta Directiva de la Universidad de California permitiria a estudiantes como él, trabajar en los predios universitarios.
La nueva norma, aprobada en mayo de este año, elimina las restricciones para contratar estudiantes indocumentados.
La restricción ha estado vigente desde 1986, cuando fue aprobada la Ley de Reforma y Control de Inmigracion que prohíbe darle trabajo a quienes carecen de documentos legales.
Las leyes federales de inmigración, en este caso, no afectaron la implementación de esta medida, ya que el sistema de la Universidad de California es un organismo estatal y no pertenece al sector privado, de acuerdo con expertos en leyes.
“El congreso federal podría cambiarlo, revisar también lo que hacen los estados”, dijo Ahilan Arulanantham, director del Centro de Políticas de Inmigracion de UCLA. “Pero, al hacerlo tienen que escribir claramente que abarca los estados”.
Aunque ya fue aprobada, los miles de estudiantes universitarios que se beneficiarían de ella están presionando para que se implemente de inmediato.
Para ello, llevarán a cabo cinco cumbres para agilizar el proceso. Los eventos contarán con la presencia de estudiantes y miembros de la Junta Directiva del Sistema de la Universidad de California.
“Van completar el plan a fines de noviembre”, dijo Arulanantham. "Entonces, [lo esperamos implementado] para enero del 2024”.
Según el Centro de Leyes de UCLA, se calcula que en California se gradúan de la preparatoria unos 27,000 estudiantes sin documentos. Pueden matricularse en las universidades pero no pueden trabajar legalmente, aunque estén cursando una maestría o doctorado.
Umaña Muñoz solo espera que se le ofrezca esa oportunidad.
“[Quiero ganar] dinero propio que me pueda aportar a mis estudios”, dijo el joven. “También voy a tener la oportunidad de ser otro al igual que mis otros compañeros de verdad”.
