WASHINGTON DC — El presidente Joe Biden emitió un decreto este jueves que sanciona a los colonos israelíes en Cisjordania acusados de atacar a palestinos en el territorio ocupado, imponiendo vedas financieras y prohibiciones de otorgar visas en principio a cuatro individuos.
Esos colonos participaron de actos de violencia, amenazas e intentos de destruir u ocupar propiedades palestinas, según el decreto. Las sanciones les impiden a los cuatro emplear el sistema financiero estadounidense y prohíben a ciudadanos estadounidenses tener negocios con ellos. Las autoridades de Estados Unidos estudiaban sanciones similares a otros implicados en los ataques, que se han intensificado durante la guerra entre Israel y Hamas.
Las autoridades palestinas dicen que algunos palestinos han sido asesinados y los defensores de los derechos humanos dicen que algunos colonos han incendiado autos y atacado comunidades beduinas, que se han visto sometidas a evacuaciones forzadas.
“Esta violencia significa una amenaza grave a la paz, seguridad y estabilidad de Cisjordania, Israel y la región del Oriente Medio, y amenaza la seguridad nacional y los intereses de la política exterior de Estados Unidos”, dijo el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan en un comunicado.
Biden enfrenta críticas crecientes por el fuerte apoyo de su gobierno a Israel a medida que aumentan las bajas en el conflicto, que comenzó cuando Hamas, la milicia que gobierna Gaza, atacó Israel el 7 de octubre.
Su decreto es una medida inusual contra el aliado más estrecho de Estados Unidos en el Oriente Medio, que según Biden tiene el derecho de defenderse. Pero el presidente demócrata ha presionado al gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para que se modere en sus operaciones militares con el fin de desarraigar a Hamas.
El decreto señala que la violencia de los colonos socava los objetivos estadounidenses, como la “viabilidad de una solución de dos Estados que garantice a israelíes y palestinos igualdad en materia de seguridad, prosperidad y libertad”.
Biden ha renovado los llamamientos a favor de un Estado palestino independiente que coexista con Israel, un objetivo que ha resultado esquivo para Washington y la diplomacia del Oriente Medio desde hace décadas. Biden ha dicho que encontrar la manera de lograr la soberanía palestina una vez que finalice la guerra entre Israel y Hamás es esencial para construir una paz duradera.
Netanyahu ha rechazado semejante idea durante toda su carrera política y ha dicho a Washington que se opone a cualquier plan que incluya la creación de un Estado palestino.