NUEVA YORK – La mujer que asesinó a su tía en marzo de 2017 con un cuchillo de carnicero imploró perdón a su familia en la corte criminal de Queens luego de que un juez le dictara sentencia, sin embargo, sus primos le negaron esa gracia.
"Es lo peor que puede haber en la vida, porque uno no se espera eso de nadie ni de esa forma", dijo María Palaguachi, hija de la víctima.
Elizabeth Sánchez, de 32 años, fue condenada el martes a 23 años de prisión, la cual cumplirá simultáneamente con dos a siete años por la violación de un menor.
Sánchez mató a cuchilladas a su tía María Sánchez, de 50 años, el 18 de marzo de 2017 a eso de las 11:00 a.m. en el apartamento ubicado en 137-38 174th Street en Jamaica, Queens.
"Ella unía a la familia, el día que falleció todo se hizo pedazos", expreso Daniel Chambacamacho, yerno de la víctima.
Sánchez, también conocida como Digna Sánchez Ortiz, habría asesinado a su tía porque estaba "obsesionada" con su primo de 14 años, con quien habría tenido relaciones sexuales al menos en tres ocasiones, según la fiscalía.
La mujer apuñaló a su tía en la cabeza, cuello y hombros y luego ocultó el crimen por dos días, hasta que las autoridades lograron que confesara. Su prima, María Adriana Palaguachi, fue quien halló el cuerpo lacerado de su madre.
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"La verdad es que nos duele demasiado", declaró para entonces José Palaguachi, esposo de la víctima.
“La acusada le quitó brutalmente la vida a su pariente cercano, alguien que la llevó a su casa cuando la mujer no tenía a donde ir”, declaró John Ryan, fiscal interino del distrito de Queens. “Fue un ataque brutal que ha traumatizado a toda una familia”.
María Sánchez, madre de cinco hijos, acogió durante seis meses en en su hogar a Elizabeth Sánchez tras migrar de Ecuador. También le dio techo a sus dos hijos y a sus hermanos.
Por eso sus primos creen que Elizabeth no merece su perdón.
Sánchez fue condenada en la Corte Suprema de Queens a 23 años de prisión por el cargo de homicidio y de dos a siete años por el de la violación de un menor.
Sin embargo, la familia cree que 23 años son muy poco para el crimen que cometió Elizabeth.