ALBUQUERQUE - La Corte Suprema de Estados Unidos emitió este jueves una decisión a favor de los niños nativoamericanos y sus familias, respaldando la Ley de Bienestar de Niños Indígenas (ICWA, por sus siglas en inglés) de 1978, ley que protege a los niños nativos y evita que estos sean separados de sus tribus por el gobierno.
El caso, Brackeen v. Haaland, fue presentado por un grupo de padres no nativos a quienes se les negó la custodia de los niños nativos que habían estado criando. Los padres argumentaron que la ICWA era inconstitucional porque discrimina por motivos de raza.
No osbtante, la Corte Suprema rechazó sus argumentos y sostuvo que el Congreso está en todo su derecho de imponer la Ley, pues lo estarían haciendo en nombre de las tribus indígenas. Asimismo, la Corte también llegó a la conclusión de que la ICWA no discrimina por motivos de raza, sino que, fue diseñada específicamente para proteger los intereses de las tribus nativoamericanas.
"El Congreso aprobó ICWA en 1978 para poner fin a la separación forzosa de los niños nativos de sus familias y comunidades. El fallo de hoy no puede deshacer las prácticas vergonzosas del pasado, pero puede ayudarnos a evitarlas en el futuro mientras trabajamos para cumplir con nuestras obligaciones legales y morales con las tribus y los niños nativos”, argumentó el senador demócrata de Estados Unidos por el distrito de Nuevo México, Martin Heinrich.
Según explicó Heinrich, el congreso aprobó la Ley de Bienestar de Niños Indígenas en 1978, luego de recibir testimonios que argumentaban que entre el 25% y el 35% de los niños nativos americanos y nativos de Alaska, fueron retirados de sus hogares por agencias de adopción.
Entonces, tras su aprobación, la ley estableció estándares de mejores prácticas para los procesos de adopción y chequeos de bienestar infantil que involucran niños que son miembros de una tribu reconocida por el gobierno federal o que sean elegibles para pertenecer a una tribu reconocida por el gobierno federal.
"Al adoptar la Ley de Bienestar de Niños Indígenas, el Congreso ejerció esa autoridad legal para garantizar el derecho de los padres indígenas a criar a sus familias como les plazca; el derecho de los niños indígenas a crecer en su cultura; y el derecho de las comunidades indígenas a resistirse a desvanecerse en el crepúsculo de la historia”, declaró el juez Gorsuch en una opinión concurrente sobre el caso.