SIOUX FALLS, Dakota del Sur — Estados republicanos que han aprobado restricciones al aborto cada vez más duras sólo para que sean bloqueadas por los tribunales federales encontraron un nuevo modelo a seguir en una ley de Texas redactada de manera inusual que representa la restricción de mayor alcance a los abortos en Estados Unidos en casi medio siglo.
El jueves, legisladores republicanos de por lo menos media decena de estados dijeron que planeaban presentar propuestas utilizando la ley de Texas como modelo, con la esperanza de que proporcione un camino para promulgar el tipo de medidas contra el aborto que han buscado durante años.
En Mississippi, el senador estatal republicano Chris McDaniel dijo el jueves que consideraría “totalmente” la posibilidad de presentar una iniciativa que se asemeje a la ley de Texas después de que la Corte Suprema del país, fuertemente dividida, le dio su respaldo.
“Creo que la mayoría de los estados conservadores en el sur observarán esta inacción por parte de la corte (Suprema) y tal vez la considerarán una oportunidad para avanzar en ese tema”, comentó McDaniel.
La ley de Texas, que entró en vigor el miércoles, prohíbe que se realicen abortos una vez que los médicos detecten el latido cardíaco fetal, lo que usualmente ocurre a las seis semanas de gestación, antes de que muchas mujeres se hayan percatado de que están embarazadas. Si bien una decena de estados han tratado de implementar prohibiciones al aborto en las primeras etapas del embarazo, esas leyes han sido bloqueadas por las cortes.
Texas podría haber encontrado una táctica para evadir a los tribunales federales al activar un plan inusual de implementación que le autoriza a los ciudadanos presentar demandas en las cortes estatales contra proveedores de abortos y contra cualquier persona involucrada en la interrupción de un embarazo, incluido alguien que lleve a una mujer a la clínica. La ley incluye una indemnización mínima de 10,000 dólares en caso de que ganen, pero no recurre a los funcionarios del gobierno para que la hagan valer.
Además de Mississippi, legisladores republicanos y opositores al aborto de por lo menos otros cinco estados controlados por republicanos, Arkansas, Florida, Indiana, Dakota del Norte y Dakota del Sur, dijeron que estaban sopesando impulsar medidas similares a la ley de Texas y su disposición de que los ciudadanos sean los que la hagan valer.
“Aunque uno pueda tener legisladores antiaborto, no siempre se tiene a burócratas antiaborto que estén dispuestos a hacer inspecciones de cumplimiento”, dijo la senadora Liz Brown, una republicana que ha patrocinado varios proyectos de ley contra la interrupción del embarazo que han sido aprobados en los últimos años.