En las exuberantes colinas verdes del suroeste de Honduras se encuentra la pequeña y remota aldea de Santa Ana. Un lugar con gente amable y trabajadora, pero con falta de atención médica.
Por esta razón, estudiantes de primer año de medicina de la Universidad de Houston están llevando su vocación y su compromiso inquebrantable de marcar la diferencia para brindar atención médica en un país donde las opciones sanitarias son limitadas.
“Tuvimos esta oportunidad para ir a Honduras y empezar estos viajes para hacer una brigada allá por una semana y me fascino mucho poder tener esta oportunidad para poder ayudar a los pacientes” dijo Stephany Sánchez, estudiante de Medicina UH.
En Honduras, aproximadamente el 80% de la población no tiene acceso a atención médica de calidad, por lo que el programa ha llevado ánimo y salud a cientos de hondureños, algo de lo que Sánchez dice sentirse orgullosa.
“Me fascino mucho tener esa oportunidad para poder ayudar a los pacientes y a personas como mis padres que son de México” dijo Sánchez.
Los estudiantes de Houston no sólo trabajaron con los pacientes en la clínica, sino que también acompañaron al Dr. Spann en sus visitas a domicilio por toda la ciudad e incluso a las zonas montañosas y rurales del país.
"Muchos de los pacientes que venían, venían de como 5 o 10 kilómetros, de 6 millas porque nunca habían tenido ayuda médica o de toda su vida o de varios meses y ahí pues podían conseguir sus medicamos de la diabetes y todo eso” dijo Sánchez