NUEVA YORK -- Un joven de 19 años fue acusado de asesinato el miércoles por la trágica muerte a puñaladas de una familia hispana, entre esos su padre, la pareja de su padre y su medio hermano de 5 años, el pasado domingo en un edificio de apartamentos en El Bronx, dio a conocer el jueves la Policía de la Ciudad de Nueva York.
Jayden Rivera recibió cargos de asesinato a múltiples víctimas, asesinato con intención, homicidio involuntario y posesión criminal de un arma.
El horrendo crimen ocurrió el domingo 26 de noviembre, a eso de las 6:40 p.m. cuando las autoridades respondieron a una llamada de emergencia sobre un hombre herido dentro de un edificio ubicado en 674 East 136th Street en la sección de Mott Haven.
Al llegar, encontraron a un hombre de 38 años, identificado como Jonathan Rivera, el padre del sospechoso, brutalmente asesinado con una herida de arma blanca en el torso en el pasillo del primer piso del inmueble, dijo la Policía.
Luego del hallazgo, los agentes encontraron a su pareja, una mujer de 33 años identificada como Hanoi Peralta, y al hijo de ambos y medio hermano del acusado, Kayden Rivera de 5 años, con varias heridas de arma blanca.
Las tres víctimas fueron declaradas sin vida en el lugar.
Otro familiar de las víctimas estaba inconsolable mientras lloraba en el lugar, un día después de que se hiciera el espantoso hallazgo.
"Mi hijo es el mejor padre del mundo", dijo Miguel Ángel Rivera sobre su hijo, Jonathan Rivera.
Un vecino que vio la sangrienta escena le dijo a nuestra cadena hermana NBC New York que escuchó algo de conmoción el domingo por la noche afuera de su casa, lo que al principio parecían dos hombres discutiendo.
"Escuché muchos gritos y luego escuché a una mujer gritando de fondo", dijo el vecino Fernando Cruz. "Lo que estaba pasando en el pasillo sonaba muy violento… Escuché los gritos y, como dije, luego hubo una última cosa en la que el hombre dijo 'Aaggghhh'. Pudo haber sido el golpe mortal. Y luego todo se calmó".
Los vecinos dijeron que las tres víctimas eran una familia tranquila, pero amable, que vivía junta en el apartamento. A menudo iban a la bodega de abajo.
“La veo todas las mañanas con su hijo y el chico que vino por la mañana a tomar el café. Eran personas muy agradables, un niño muy agradable y la señora era muy amable”, dijo el dueño de la bodega Dahan Ali. "Estaba tan molesto que no lo puedo creer. No merecían esas cosas, especialmente esta familia. Era una familia muy agradable".
Una investigación sigue en curso.