NUEVA YORK — El congresista George Santos espera ser expulsado del Congreso de Estados Unidos tras el mordaz informe de la Comisión de Ética de la Cámara de Representantes, que reveló pruebas sustanciales de infracción de la ley por parte del republicano neoyorquino.
En un desafiante discurso el viernes, salpicado de burlas y obscenidades dirigidas a sus colegas del Congreso, Santos insistió en que él “no iba a ninguna parte”.
Pero reconoció que su tiempo como miembro del Congreso, al menos, podría terminar pronto.
“Sé que me van a expulsar cuando esta resolución de expulsión llegue al pleno”, dijo el viernes por la noche durante una conversación en X Spaces. “He hecho las cuentas una y otra vez, y la situación no luce muy bien”.
Los comentarios se produjeron una semana después que el presidente republicano de la Comisión de Ética de la Cámara de Representantes, Michael Guest, presentara una resolución para expulsar a Santos una vez que el organismo regrese de las vacaciones de Acción de Gracias.
Aunque Santos ha sobrevivido a dos votaciones de expulsión, muchos de sus colegas que antes se oponían a la iniciativa ahora dicen que la apoyan, citando las conclusiones de la investigación de la Comisión, de un mes de duración, sobre una amplia gama de presuntas faltas cometidas por Santos.
Según el informe, Santos utilizó fondos de la campaña para fines personales, como compras en tiendas de lujo y sitios web de contenido para adultos, y luego hizo que el equipo de campaña presentara informes falsos o incompletos.
“El congresista Santos trató de explotar fraudulentamente todos los aspectos de su candidatura a la Cámara de Representantes para beneficio económico personal”, escribieron los investigadores.
Señalaron que no cooperó con el informe y “evadió” repetidamente las solicitudes directas de información.