Quienes se naturalizan como ciudadanos estadounidenses adquieren derechos y privilegios que no tenían como titulares de la tarjeta verde, o la "green card", pero también obligaciones ante el Gobierno.
Muchos inmigrantes naturalizados desconocen que la ciudadanía puede ser revocada. Y los desnaturalizados están sujetos a la deportación.
Si bien no es común que el Gobierno imponga una sanción tan severa, los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) establecen que una persona puede estar sujeta a la revocación de la naturalización por las siguientes causas:
MENTIR DURANTE EL PROCESO DE NATURALIZACIÓN O SE ADQUIRIÓ DE FORMA ILEGAL
El Gobierno revocaría la ciudadanía en caso que se compruebe que el inmigrante no cumplía con los requisitos o la obtuvo de forma ilegal, lo que incluye irregularidades en los requisitos de residencia, de presencia física o de buen carácter moral.
La revocación procederá aún si el inmigrante desconoce que incurrió en tales irregularidades o si se trató de un caso de negligencia.
Las faltas incluyen ocultar, omitir o tergiversar información de manera deliberada durante el proceso, ya sea en la entrevista con un oficial de inmigración o en los documentos entregados.
Inmigración
POR ALTA TRAICIÓN
Según las leyes, una persona puede perder la ciudadanía estadounidense si ocupa un puesto político en un país extranjero y afirma explícitamente que su lealtad está con dicha nación.
También corre el riesgo de perderla si ingresa al Servicio Militar de una nación en conflicto con Estados Unidos.
BAJA DESHONROSA DE LAS FUERZAS ARMADAS
Si un inmigrante obtuvo la ciudadanía por servir a las Fuerzas Armadas y después fue dado de baja en “condiciones poco honorables”.
El requisito de servicio es de al menos cinco años.
SOLICITAR CIUDADANÍA A OTRO PAÍS
Si una persona viaja a un país extranjero y solicita la ciudadanía, el Gobierno asumirá que está renunciando a la ciudadanía estadounidense.
RENUNCIA VOLUNTARIA
Un inmigrante naturalizado puede renunciar a la ciudadanía si acude a un Consulado o embajada de Estados Unidos y firma un juramento de renuncia. Tal acción implica renunciar a todo los derechos, y sin la ciudadanía de otra nación, en automático se convierte en apátrida, remarca el Departamento de Estado.
Los ciudadanos estadounidenses nacidos en el país no perderán la ciudadanía bajo los principios descritos, pero pueden optar por renunciar a su ciudadanía por sí mismos.
NEGATIVA A TESTIFICAR ANTE EL CONGRESO
Un naturalizado no puede negarse a declarar ante un comité del Congreso en caso de una investigación relacionada con actos subversivos, como los destinados a dañar a funcionarios del gobierno.
Dicho requisito de declarar para mantener la condición de ciudadanía expira después de 10 años.
MEMBRESÍA EN GRUPOS SUBVERSIVOS O TERRORISTAS
La ciudadanía puede revocarse si el Gobierno demuestra que eres miembro de una organización subversiva en los cinco años después de naturalizarse.
La membresía en tales organizaciones se considera una violación del juramento de lealtad. Los ejemplos incluyen el Partido Nazi y Al Qaeda, entre otros grupos.
EL PROCESO DE DESNATURALIZACIÓN
En general es un proceso que ocurre en una Corte Federal, en específico en el tribunal de distrito donde reside el acusado, y se efectúa bajo las reglas estándar de los casos de la Corte Civil Federal. Eso significa que no es un caso de inmigración, pese a que afecta la situación migratoria.
Según las leyes de Estados Unidos, los menores a los que se les concede la ciudadanía según la situación migratoria de sus padres también pueden perder la ciudadanía después de que se desnaturaliza a uno de sus padres.
El proceso de desnaturalización comienza con una denuncia formal contra el acusado, quien puede responder a la demanda y defenderse en el juicio, como en cualquier caso civil. El acusado tendrá hasta 60 días para responder a la denuncia.
El Gobierno emprende una demanda solo cuando puede demostrar de forma contundente y con evidencia sólida que el acusado cumple con los criterios de desnaturalización.
“Debido a que la ciudadanía es un derecho tan preciado, no se puede quitar a menos que el Gobierno pueda cumplir con una gran carga de la prueba… En consecuencia, un caso solo debe remitirse a la desnaturalización cuando exista evidencia objetiva que demuestre que el individuo no era elegible para la naturalización, o naturalización adquirida por ocultamiento voluntario o tergiversación material”, detalla el manual de USCIS.