WASHINGTON - El Senado federal confirmó este martes el nombramiento de Pete Buttigieg como secretario de Transporte, lo que lo convierte en la primera persona abiertamente gay en ocupar un puesto en el gabinete presidencial de Estados Unidos.
La confirmación de Buttigieg se produjo por una amplia mayoría de 86 votos a favor y 13 en contra.
El nombramiento del joven político, de 39 años, ya había sido respaldado la semana pasada en el Comité de Comercio del Senado por 21 votos frente a 3 en contra.
El exalcalde de South Bend, Indiana, quien fue uno de los aspirantes a la candidatura presidencial demócrata para las elecciones del 2020, había sido nominado por Joe Biden para la Secretaría de Transporte el 16 de diciembre.
En esa ocasión, al ser presentado formalmente por Biden en Wilmington, Delaware, como su elegido para ocupar el cargo, el joven político reivindicó su homosexualidad y el hecho de poder expresarla abiertamente.
Buttigieg recordó cuando tenía 17 años y vio cómo el Senado del país rechazó celebrar una audiencia para James Hormel, el elegido por el entonces presidente Bill Clinton para ser embajador de EEUU en Luxemburgo, por ser gay.
Pese a los obstáculos, finalmente Clinton nombró a Hormel cuando el Senado estaba en receso, aunque nunca recibió el visto bueno de la Cámara Alta, pero esa situación marcó a Buttigieg.
"Aprendí algo sobre algunos de los límites que hay en este país sobre a quién se le permite pertenecer, pero igual de importante es que vi cómo esos límites podían desafiarse. Dos décadas después, no puedo dejar de pensar en que haya alguien de 17 años en algún lugar que podría estar viéndonos ahora", dijo entonces.
A sus 39 años recién cumplidos (cumplió años el 19 de enero, un día antes de comenzar el mandato de Biden), Buttigieg se ha convertido también en el miembro de gabinete de gobierno más joven de la historia de EEUU.
En el Departamento de Transporte, Buttigieg se enfrenta al reto de reconstruir la deteriorada infraestructura pública del país, después de que en los dos anteriores gobiernos, el de Donald Trump (2017-2021) y Barack Obama (2009-2017), fracasaran sus ambiciosos proyectos de inversiones en este sector.
El medioambiente y la lucha contra la crisis climática también serán objeto de su atención al frente de la Secretaría de Transporte, impulsando el mercado de vehículos eléctricos.
Al presentar a Buttigieg, Biden avanzó que quiere hacer "una segunda gran revolución del ferrocarril" pero, sobre todo, construir "comunidades más resilientes al clima para afrontar inundaciones más extremas, sequías y grandes tormentas".
Pese a haber sido rival de Biden en las primarias demócratas, Buttigieg se retiró del proceso y anunció que lo apoyaba justo antes del decisivo Supermartes del 3 de marzo de 2020, una victoria decisiva para el exvicepresidente, que a la postre consiguió aglutinar el apoyo de los votantes moderados y se erigió como el candidato de consenso del partido.
Las primarias, sin embargo, catapultaron a la fama al exalcalde de South Bend, quien pasó de ser un desconocido para la mayor parte de los estadounidenses a ser el favorito en la bancada moderada del partido, después de ganar por un estrecho margen los caucus de Iowa, el primer estado en votar en las primarias demócratas.
Asimismo, Buttigieg se perfiló como un millenial modélico que mezclaba su mensaje de esperanza con valores profundamente cristianos y con la constante reivindicación de su condición como veterano del ejército, ya que combatió en Afganistán.