Un hombre de 28 años se encuentra tras las rejas en relación con la brutal paliza propinada a un encargado de estacionar autos en el famoso restaurante Barney's Beanery en West Hollywood en un ataque aparentemente no provocado.
Dorian Michael Gray, de 28 años, fue arrestado el viernes y se encontraba detenido sin derecho a fianza, según el Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles y los registros de la cárcel.
Los funcionarios del alguacil dijeron que fue fichado por sospecha de intento de asesinato, agresión y asalto con un arma mortal. La investigación se estaba presentando a la Oficina del Fiscal de Distrito para que se consideraran los cargos penales.
El sospechoso está acusado de atacar brutalmente a Efraín “Frankie” Zarazua el 14 de septiembre, alrededor de las 10:30 p.m., fuera del restaurante ubicado en el 8447 del Bulevar Santa Mónica.
El video de vigilancia del ataque muestra al agresor sin camisa tirando a Zarazua al suelo y luego pisoteandolo y pateándolo repetidamente en la cabeza.
“La víctima recibió un puñetazo y quedó inconsciente cuando cayó al suelo, se golpeó la cabeza contra el suelo”, dijo el detective del Alguacil Brandon Zeff a los periodistas el martes por la mañana.
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“Y luego el sospechoso pateó a la víctima aproximadamente siete veces en la parte superior del torso y en la cabeza. Los testigos lo describieron como alguien que también pisoteó la cabeza de la víctima durante ese incidente”.
Representantes del alguacil dijeron que creen que el mismo sospechoso también puede haber llevado a cabo al menos otros cuatro ataques en la misma área general en un lapso de 20 minutos, pero las lesiones infligidas en esos ataques no fueron tan graves.
Según una publicación de Instagram de Barney's Beanery después del ataque, Zarazua ha trabajado para el restaurante durante más de 30 años.
“Es amable, divertido y acogedor con todos los que conoce”, según el restaurante.
Zarazua fue hospitalizado en cuidados intensivos. Su esposa, Irma, escribió en una página de GoFundMe a fines de septiembre que lo habían sacado de cuidados intensivos y que estaba “en camino de recuperarse”.
“Dadas las circunstancias de las heridas en la cabeza que recibió después del asalto, tiene un largo camino de terapia y rehabilitación”, escribió. “Para agregar, también tiene un pómulo roto que se curará solo, pero su cerebro estaba hinchado y se está curando lentamente”.
El hijo de Zarazua, Chris, dijo a los periodistas después del asalto que su padre podría haber muerto en el brutal ataque. Dijo que otro compañero de trabajo en el restaurante había sido atacado por el sospechoso en una parada de autobús cercana, y otra persona fue atacada cerca.
“Creo que mi padre ... estaba tratando de ver por qué había habido tanta conmoción, y desafortunadamente se topó con ... el agresor”, dijo.
Se solicita a cualquier persona que tenga información que se comunique con Zeff al 310-358-4033 o bgzeff@lasd.org. Se pueden realizar denuncias anónimas a través de CrimeStoppers al 800-222-TIPS (8477).