El inicio de las deportaciones masivas, algo que prometió el presidente Donald Trump en su campaña, está afectado el sector agrícola, ya que está limitando la mano de obra en los campos. Luis Zaragoza reporta para Telemundo 52 a las 6 p.m. el 30 de enero de 2025.
El inicio de las deportaciones masivas, algo que prometió el presidente Donald Trump en su campaña, está afectando el sector agrícola, ya que está limitando la mano de obra en los campos, algo que podría ocasionar una escasez de productos.
Algunos campos agrícolas en los condados de Riverside y San Bernardino lucen desolados ante la falta de trabajadores por miedo a ser deportados.
“Yo tenía 50 hombres trabajando, ahorita traigo 2”, dijo Hilarión Esquivias, dueño de campo agrícola, quien afirmó que existe mucho temor a las redadas.
Una trabajadora del campo, quien decidió mantenerse en el anonimato por temor, dijo a Telemundo 52 que desde la llegada del presidente Donald Trump, el miedo se ha vuelto colectivo entre varios de sus compañeros, ya que prefieren mejor quedarse en casa.
“Vivimos ahorita con tanto miedo por toda la situación que se ha visto, hemos visto la migra pasar y traer carros civiles”, dijo la trabajadora agrícola.
La situación no solamente está afectando económicamente a dueños de granjas, campos agrícolas y trabajadores. Expertos dicen que la falta de producción de frutas y vegetales también podría originar escasez, lo que al final repercutirá en los bolsillos de los consumidores.
"El hecho de que si no se levantan las cosechas a tiempo se puede echar a perder, por su puesto hay menos opción, menos productos. Por lo tanto, el producto que si llegue al supermercado va a hacer bastante más caro", dijo Iván González, experto en Economía.
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Pero aun con miedo e incertidumbre, muchos de estos trabajadores tienen que salir a cumplir con sus labores para traer el pan de sus hogares.
“Tengo que arriesgar porque hay que trabajar, pero siente uno el temor de no regresar a casa”, dijo la trabajadora.
Mientras tanto, los dueños de estos campos agrícolas, hacen lo que pueden para salir adelante.
“Yo tengo 80 años y ando aquí porque no hay gente”, dijo Esquivias. “Si no hay raza, no hay trabajo, no sacas el trabajo”.
De acuerdo con un informe de la Universidad de California, la mayoría de los trabajadores agrícolas en el estado no cuentan con un permiso de trabajo.