La Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles votó el martes para cerrar las brechas en la infraestructura de carga de vehículos eléctricos de la región, incluida la búsqueda de formas de ubicar estaciones en comunidades de bajos ingresos.
Las supervisoras Janice Hahn y Sheila Kuehl fueron coautoras de una moción para crear un “Plan de Infraestructura de Cero Emisiones” centrado en ampliar la cantidad de estaciones de carga en todo el condado.
“No es sorprendente que la gran mayoría de los vehículos eléctricos en el condado de Los Ángeles y las estaciones de carga de las que dependen estén en vecindarios de altos ingresos”, dijo Hahn.
“Pero si realmente queremos tener más vehículos eléctricos en la carretera, debemos expandir drásticamente la infraestructura de nuestra estación de carga y hacer que estos autos sean prácticos para todos los conductores, sin importar dónde vivan o dónde trabajen ''.
Kuehl destacó los compromisos recientes con los vehículos eléctricos de General Motors, así como de funcionarios federales y estatales.
“Este es un momento fantástico para pisar el acelerador a fondo”, dijo Kuehl. “GM está terminando su fabricación de autos a gasolina; el presidente está invirtiendo en estaciones de carga de vehículos eléctricos; El plan del gobernador quiere que todos los autos nuevos tengan cero emisiones”
El objetivo es instalar 60,000 estaciones de carga cero emisiones para 2025.
En la actualidad, hay menos de un tercio de ese total en uso público y privado en el condado de Los Ángeles, según la Comisión de Energía de California.
El trabajo incluirá el mapeo de las instalaciones del condado, derechos de paso, parques, bibliotecas y otras propiedades donde se podrían ubicar las estaciones, incluidas a lo largo de la autopista Long Beach (710) para cargar vehículos de servicio mediano y pesado.
El condado buscará socios privados que puedan ayudar a abordar la disparidad en la adopción de vehículos eléctricos y las estrategias de financiación para instalar y operar equipos de carga.
Para 2045, el condado apunta a carreteras donde todos los vehículos privados nuevos de servicio ligero tengan cero emisiones. Los puertos de Los Ángeles y Long Beach se han comprometido a hacer la transición de los equipos terminales a cero emisiones para 2030 y a los camiones de carretera para 2035.