Winchester

Santuario de patos lucha por salvar cientos de huevos de Balut eclosionados

En ciertas culturas, los huevos de balut son huevos de pato que se incuban casi hasta el punto de eclosionar y luego se hierven y se comen.

Telemundo

Los voluntarios de un santuario de patos del condado de Riverside están luchando para salvar la mayor cantidad posible de crías después de una “situación horrible” en la que cientos de huevos fertilizados fueron abandonados en el condado de Orange debido a un retraso en el envío.

Los huevos fueron recogidos por unos 20 voluntarios en un estacionamiento de Walmart en Brea el sábado, después de que una mujer se pusiera en contacto con The Duck Sanctuary en Winchester en posesión de unos 300 de los llamados “huevos de balut”. 

En otras culturas, los huevos de balut son huevos de pato que se incuban casi hasta el punto de eclosionar y luego se hierven y se comen.

Una familia en Apple Valley miró hacia su patio trasero y vio entre 30 y 40 patos disfrutando a la orilla de la piscina.

“La historia resultó que era una empresa que vende huevos de balut a clientes y que el envío se retrasó y, a su vez, sus clientes los compraron a un proveedor diferente”, escribió el fundador del santuario, Howard Berkowitz, en una publicación en las redes sociales. “Se quedaron con varios cientos de huevos de pato fertilizados y estaban empezando a eclosionar”.

Las probabilidades estaban en contra de los animales, ya que no se les proporcionó la humedad adecuada para nacer.

“Cuando se incuban adecuadamente los huevos, siempre se controla la humedad para que estén listos para la vida”, dijo, y agregó que “no se les dio ningún alimento ni agua después de que eclosionaron”. ... Perdimos bastantes después de recogerlos y seguimos perdiéndolos a medida que avanzaba el día”.

Algunos de los huevos comenzaron a eclosionar en el estacionamiento de Walmart, lo que llevó a los voluntarios a correr a la tienda a comprar agua y platos en un esfuerzo frenético por hidratar a los recién nacidos.

“Comenzamos a darles agua y comida y rápidamente la mayoría empezó a animarse. Desafortunadamente, al mismo tiempo perdimos a más de 30 que simplemente no pudieron sobrevivir”', dijo Berkowitz.

Berkowitz dijo a City News Service (CNS) el martes que 120 bebés todavía estaban vivos, 85 en el santuario y otros 35 bajo el cuidado de familias adoptivas.

Los sobrevivientes estaban mucho mejor el martes, dijo.

El video fue captado por el reportero de deportes de NBC4, Michael J. Duarte.

“Lo están haciendo muy, muy bien. Están todos en pie y corriendo y limpiándose, que no es lo que hacían el día uno y el día dos”, dijo a CNS. “Se ven muy bien hoy. Darles los electrolitos realmente ayudó”.

El santuario está buscando donaciones para ayudar a financiar el esfuerzo continuo para cuidar a las crías y encontrarles un hogar.

Las donaciones se pueden hacer en theducksanctuary.com.

Se recomienda a aquellos interesados ​​en acoger a un pato bebé que se pongan en contacto con la organización de rescate. Berkowitz dijo que él proporciona la comida y que los animales requieren un cuidado mínimo. 

Necesitan estar al aire libre durante el día y adentro durante la noche y, por supuesto, necesitan acceso al agua, que se les puede proporcionar con un bebedero para pollos del tipo que se vende en las tiendas de suministros agrícolas.

Berkowitz, un bioquímico, fundó el santuario hace 10 años. Ha tenido que cambiar de lugar varias veces debido a quejas de los vecinos. La ubicación de Winchester también es temporal; Berkowitz dijo a CNS que está tratando de recaudar fondos para comprar una propiedad de 20 acres en Aguanga, donde no tendría restricciones sobre la cantidad de animales que podría tener.

Rafael Chávez lleva más de 35 años dedicados a la colombofilia, que consiste en la cría y adiestramiento de palomas.

El santuario, que rescata patos y gansos abandonados, cuenta con seis voluntarios habituales y otros tres miembros del personal.

El esfuerzo por salvar tantas crías está pasando factura a Berkowitz y a los voluntarios, que han tenido que ver morir a muchos de los patos jóvenes.

“Esta noche dejé descansar a todas esas pequeñas y hermosas almas", escribió Berkowitz el lunes en una publicación acompañada de un video de un entierro en su jardín.

“... Me costó todo lo que tenía para despedirme de estos dulces inocentes, serán libres de todo el mal que este mundo les ofrecía. Algunos solo vivieron 1 día, otros 2 y otros 3... sin comida, sin agua, sin amor... solo para terminar en manos del santuario y luego comida, agua y sobre todo... el amor fue dado... aunque sólo sea por un breve tiempo”.

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