Los incidentes en distintas áreas del condado de Los Ángeles han acabado con la vida de personas inocentes.
Un conductor que participaba a alta velocidad en una carrera clandestina le quitó la vida a Raymond Olivares en febrero del 2023.
“No es justo, no es justo lo que pasó solo por hacer esas carreras, por andar en las calles ellos con sus carros haciendo carreras”, lamenta su madre, Gloria Dolores Suárez.
El accidente ocurrió en su vecindario en Compton, justo frente a su casa.
La madre de Raymond Olivares sabe que ya no puede abrazar a su hijo. María de Jesús Rivas Cruz, quien era la prometida de este joven que perdió la vida a los 27 años, comparte esa misma realidad.
También tiene que enfrentar los golpes físicos, fracturas y la hemorragia cerebral que le provocó el impacto.
“Físicamente, le echo ganas todos los días y me siento mejor cada día. Emocionalmente no”, dice Rivas Cruz. “Ya me está pegando más y más. Lo extraño mucho”.
El futuro de ambos quedó truncado en pocos minutos.
“Los dos trabajaron para su sueño, para agarrar su casa y su sueño se lo truncaron en un segundo”, dice Suárez.
Miembros de la comunidad como Cindi Paola Enamorado, hermana de Raymond Olivares, se sienten cansados de estos actos criminales y se han convertido en la voz de justicia. Apoyan leyes más estrictas.
“Yo creo que ellos nomás piensan en su ratito de diversión pero no piensan en el daño que les van a causar a sus propios padres”, dice Enamorado. “Porque un padre no quiere ir a una cárcel a ver a su hijo”.
Las oficinas del despacho de la Patrulla de Caminos (CHP), a ciertas horas, no se dan abasto por las llamadas que reciben por este tipo de incidente.
“A veces llaman porque simplemente ya ha ocurrido una tragedia y necesitan asistencia con los accidentes”, dice Susana Carrilo, despachadora del CHP.
Tan solo en el 2021, el CHP respondió a más de 7,300 exhibiciones de carreras ilegales.
Las autoridades destacan que estas actividades resultan en otro tipo de incidentes como choques y tiroteos. Incluso se han visto niños asistiendo a estos eventos.
“Si alguna tragedia ocurre es algo que no debería de haber pasado”, dice Carrillo. “Y pues si, da mucha lástima que alguien inocente o no inocente se lastime o se mate por algo así”.
Medidas contra las carreras ilegales
Cifras recientes del LAPD indican que residentes hicieron hasta 20,000 denuncias de tomas ilegales de calles entre el 2020 y el 2022. Y aunque sí hubo una disminución del 36% el año pasado, ciertas áreas se siguen viendo más afectadas que otras.
Es por ello que agencias del orden público se han unido para evitar que más personas resulten heridas o mueran en tomas ilegales de calles.
“Lo que el público nunca ve, ¿verdad? [es] una persona muerta que obviamente para nosotros nos afecta a tal nivel”, dijo el oficial Roberto Gomez de la Patrulla de Caminos de California (CHP).
“Pero lo vemos tan frecuentemente y cuando es algo 100 % evitable, eso es lo difícil”
El CHP ha visto choques en más de 260 tomas ilegales de calles en un periodo de 5 años. 30 de estos accidentes tuvieron resultados mortales.
La unidad de combate de carreras del CHP está usando un sistema de imágenes térmicas con un avión especial para detectar, desde el aire, a los vehículos participantes.
El problema ha ido escalando en el condado de Los Ángeles. Debido al alto número de tomas de calles, Compton ha sido catalogada como la meca de estos hechos ilegales.
La alcaldesa Emma Sharif ha escuchado los impactos que estas están teniendo en su ciudad en las audiencias comunitarias. La frustración admite, no es para menos.
“Para prevenir que las tomas sigan ocurriendo vamos a usar todas las herramientas disponibles”, dijo la alcaldesa.
“Vamos a continuar instalando los topes donde sean solicitados porque aunque no las están parando del todo, según el alguacil, si son efectivos para disminuirlas. También estamos trabajando con equipos de tácticas de diferentes ciudades y vamos a continuar con eso”.
Consecuencias legales para los infractores
Además del peligro que representan los movimientos de auto para los presentes, los espectadores también enfrentarían citatorios.
En California, es una violación a la ley participar, organizar o simplemente estar en esas carreras ilegales. Esto trae consecuencias.
“Remolcando el vehículo que últimamente lo que le va a afectar es el bolsillo”, dice el oficial Gomez. “Esperemos que 30 días en una yarda de remolque, pagando más de $2,000 dólares cada vez que ocurre eso [los haga reflexionar]”.
El teniente Jesse García trabaja en la unidad de combate de carreras para el Departamento de Policía de Los Ángeles. Señala que colaboran con el Departamento de Vehículos Automotores (DMV) para suspender las salidas a quienes sean sorprendidos en estos espectáculos.
“Como digamos, el año pasado llegando los fines de año tuvimos aquí, en el equipo central de Los Ángeles, más de 500 arrestos sobre esta actividad”, dijo Garcia. “Incautamos casi 500 carros”.
El oficial asegura que el problema empezó en 2015. Ahora el LAPD tiene hasta 4 equipos especializados en las 4 áreas de comando de la ciudad.
“Y estamos buscando que los legisladores nos ayuden a cambiar esas leyes”, dice el teniente García.
“Una de las ideas son las fianzas más altas, más penalidades, remover los vehículos de la carretera de un modo quitándoles el instrumento que usan para cometer estos crímenes”.
Por el momento, según el Departamento de Transporte de Los Ángeles, las barreras instaladas en la intersección del Bulevar Glenoaks y la Calle Polk, en Sylmar, parecen estar dando un buen resultado.
“Si están pensando en entrar en esta actividad no lo hagan, vayan a la pista de carreras, háganlo de un modo legalmente”, dice Garcia.
