Una familia y sus amigos, aseguran haberle entregado cientos de miles de dólares a un hombre que, insisten, les prometió multiplicarían su dinero con creces, pero hoy, más de un año después, aún tras denunciarlo a las autoridades estatales y federales, siguen esperando sus pagos. Telemundo 52 Responde tiene la segunda parte de ¿dónde quedó mi dinero?
Tras recibir denuncias de más de una docena de personas, todas apuntando a Josué Vásquez, dueño de Wolf and Raven, decidimos ir a buscarlo para pedirle respuestas. Aquí le cuento lo que encontramos.
En noviembre del 2022, visitamos este edificio de Santa Ana, donde, según nos dijeron varios de sus clientes, los atendió Josué Vásquez, dueño de Wolf and Raven LLC, compañía definida por él mismo como una “incubadora de negocios”. Fue aquí, según cuentan Marina González y su hijo Joshua, que se encontraron con él:
Marina González invitó a su familia a participar en una inversión. “Ahí tenía la secretaria, la que hacía los cheques, ahí estaba el procesador, Josué Vásquez”, dijo Marina González.
Sin embargo, cuando fuimos a buscarlo, esas oficinas en Santa Ana, según nos dijeron en el mismo edificio, tenían tiempo cerradas.
La razón por la cual fuimos a hablar con Vásquez fue que, de acuerdo con todas estas personas, les ofreció contratos que no se cumplieron, tal como han denunciado ante el Procurador Estatal, así como el fiscal del condado de Los Ángeles y la Comisión Federal de Comercio.
El trato, que aseguran Vásquez, a través de su compañía Wolf and Raven LLC les ofreció, era prestarle dinero por un año a CG Bank, un presunto banco privado en el extranjero, que, según este sitio de internet -que es difícil accesar, pues levanta alertas de seguridad en los principales buscadores de internet- estaría ubicado en las islas Comoras, cerca de África. Intentamos confirmar si el banco realmente existe, pero al llamar al número telefónico que ofrece el sitio responde una máquina, y no hay forma de dejar mensaje, y a pesar de haber enviado múltiples correos electrónicos a presuntos empleados, nadie nos respondió con respecto a los presuntos préstamos.
De hecho, una búsqueda en internet de CG Bank arroja resultados que indican que es una estafa.
Cabe mencionar que los contratos no están firmados por CG Bank, solo por Vásquez, a nombre de su compañía, “Wolf and Raven”, aunque indica que él solo está “procesando el préstamo” y que de ninguna manera se responsabiliza por el mismo. Y dicen que por cada 10,000 dólares que presten, los participantes recibirán mensualidades de poco más de $2,000, o sea que, al paso de un año, por cada 10,000 dólares, la persona recibiría $24,455.
Pero ha pasado más de un año y los pagos, según nos dicen los afectados, se detuvieron desde febrero del 2022. Aunque para algunos, como el señor Corona, las mensualidades ni siquiera comenzaron
“El primer pago me tenían que hacer ellos 27 de febrero del 2022, y no nunca recibí ningún pago”, dijo Hector Ruben Corona.
“¡Tiene una labia! Ese camarada tiene una labia que te vende un perro muerto como vivo y se lo compras”, dijo Armando García quien “prestó” $20mil dólares.
Así describe Armando García, quien invirtió $20mil dólares, a Josué Vásquez, quien, según cuenta, les prometió que no había riesgo.
“¡Todo estaba pintado perfecto! Me dijeron esto no es una inversión esto es un préstamo, su dinero está asegurado”, dijo García.
Y cuando los pagos dejaron de llegar, dicen que Vásquez les dio esta explicación:
“Mandó un mensaje diciendo que había unos problemas, que se iban a solucionar. Iban a hacer unos ajustes con el banco. El banco estaba creciendo. Supuestamente lo había comprado otro banco más grande”, dijo Hector Ruben Corona.
Pero los presuntos problemas, nunca se solucionaron. Y aunque el contrato tiene una cláusula (la número 10) que indica que, si algo sale mal, se les reembolsará su dinero, más de un año después, aseguran no han recibido ninguna devolución. Los contratos de este grupo de personas, firmados por Vásquez indican que en conjunto prestaron $360mil dólares, así que, cuando averiguamos que Vásquez se presentaría ante la Corte Superior de Los Ángeles por un caso separado que enfrenta, fuimos a pedirle respuestas.
Durante una interacción con Vásquez frente a la corte le pregunté: “¿usted cometió fraude contra esta gente? ¿se está quedando con su dinero?”. Josué Vásquez respondió: “usted puede acusarme de lo que usted quiera, muéstreme pruebas de que he cometido fraude, y entonces hablamos”.
Azalea: “no lo estoy acusando, le estoy preguntando… una respuesta directa… ¿sí o no se está quedando con el dinero de esta gente?”.
Josué Vásquez: “¡no tengo por qué responderle a usted, usted es una simple reportera… ¡chis! ¡gracias! Así de simple… así que…(smiles sarcastically) discúlpemeeeee….Si quiero dar mi lado, allá se lo doy al juez”.
Cabe mencionar que Vásquez, quien negó rotundamente haber cometido un fraude, anteriormente había dicho me daría una entrevista en cámara, sin embargo nunca propuso una fecha exacta, pues dijo estar muy ocupado, fue por ese motivo que lo abordamos en la vía pública. Molesto tras este encuentro, me envió un mensaje, asegurándome que su abogado se comunicaría conmigo, así que le pedí sus datos para comunicarme directamente con él, pero me los negó. Eso fue el 9 de enero y el supuesto abogado, aún no me ha contactado.
Este caso ya está en manos de las autoridades, aunque aún no han determinado si se cometió un fraude o no. Pero este tipo de ofertas de inversión, en que la gente dice estar perdiendo sus ahorros de toda la vida, se están reportando con mayor frecuencia que nunca. Así que, hablé con expertos del FBI, que tienen importantes recomendaciones para poder distinguir entre una oportunidad real, y un fraude. Eso se lo tengo mañana, en la tercera parte de ¿dónde quedó mi dinero?