Bill Richardson, exgobernador de Nuevo México y exembajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, falleció este sábado a los 75 años, según el Centro Richardson para el Compromiso Global.
El también exsecretario de Energía durante la presidencia de Bill Clinton falleció en paz mientras dormía. Vivió toda su vida al servicio de los demás, incluido su tiempo en el gobierno y su carrera posterior ayudando a liberar a personas tomadas como rehenes o detenidas injustamente en el extranjero", dijo Mickey Bergman, vicepresidente del Centro Richardson.
Richardson fue nominado al Premio Nobel de la Paz el mes pasado en reconocimiento a su trabajo para proteger a los estadounidenses, más recientemente a la jugadora de la WNBA Brittney Griner, la estrella del baloncesto y dos veces medalla de oro olímpica que estuvo detenida en Rusia durante 10 meses.
El político demócrata nació en Pasadena, California, y vivió en Ciudad de México durante gran parte de su niñez. Su madre era mexicana y su papá trabajaba para lo que hoy es Citibank en México.
Durante las últimas tres décadas, Richardson viajó por el mundo negociando y asegurando la liberación de prisioneros y rehenes estadounidenses en Bangladesh, Corea del Norte, Sudán, Colombia e Irak.
La organización sin fines de lucro Richardson Center fue creada para apoyar al exgobernador a facilitar el diálogo y la paz global entre países con relaciones diplomáticas tensas.
"No había ninguna persona con la que el gobernador Richardson no hablaría para cumplir la promesa de devolverle la libertad a alguien. El mundo ha perdido un defensor de aquellos detenidos injustamente en el extranjero y yo he perdido un mentor y un querido amigo", dijo Mickey Bergman.