Funcionarios de salud: deportes juveniles podrían ser riesgo para contagios

Cinco de los brotes actuales de COVID-19 que involucran a escuelas en el condado de Los Ángeles están asociados con la participación en deportes juveniles.

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Lo que debes saber

  • Cinco de los brotes actuales de COVID-19 que involucran a escuelas en el condado de Los Ángeles están asociados con la participación en deportes juveniles.
  • Los brotes actuales involucran a estudiantes que participan en fútbol, ​​baloncesto, béisbol y baile.
  • Las escuelas que han reabierto en Los Ángeles han mostrado un excelente cumplimiento de los protocolos COVID-19, dijeron funcionarios de salud del condado.

Las escuelas que han reabierto en todo el condado de Los Ángeles están mostrando un excelente cumplimiento de los protocolos COVID-19, y el director de salud pública del condado proclamó que los campus son seguros para los niños, pero que los deportes juveniles son más un desafío y se podrían implementar reglas más estrictas para los participantes.

Barbara Ferrer dijo el lunes que de los cinco brotes actuales de COVID-19 que involucran a escuelas, tres en Santa Clarita y una en Redondo Beach y Agoura Hills, “todos están asociados con la participación en deportes juveniles, no con la asistencia a clases en la escuela”.

“Sabemos que el enmascaramiento y el distanciamiento pueden ser un desafío en algunos deportes, y que socializar durante estas actividades fuera del campus de la escuela también podría ser un factor en la transmisión del virus entre estos grupos”, dijo. 

“Estamos analizando detenidamente la guía actual para los deportes juveniles y es posible que hagamos recomendaciones adicionales más adelante esta semana para mitigar los aumentos que estamos viendo en la transmisión entre los participantes del deporte juvenil”.

Los brotes actuales involucran a estudiantes que participan en fútbol, ​​baloncesto, béisbol y baile.

Sin embargo, asistir a la escuela está demostrando ser un paso seguro, dijo Ferrer. Dijo que de los campus escolares visitados por los inspectores de salud, más de la mitad tenían tasas perfectas de cumplimiento con los protocolos COVID-19, mientras que el 35% tenía un 90% o más de cumplimiento y el 10% tenía un 80-89% de cumplimiento.

“Los estudiantes están bastante seguros en las escuelas siempre que se sigan los protocolos de seguridad”, dijo.

Ferrer en general mantuvo su “optimismo cauteloso” sobre la batalla del condado contra COVID-19, notando una caída del 98% en el promedio de casos diarios desde el aumento invernal, junto con una caída del 94% en las hospitalizaciones diarias y una disminución del 97% en las muertes.

“Con estas tasas de casos estables y continuas y la positividad de las pruebas diarias con un promedio de alrededor del 1%, todos podemos tener la esperanza de que nuestro progreso en la desaceleración de la transmisión no sea una ilusión”, dijo. 

“Sin embargo, si esperamos mantener este notable progreso, debemos ser realistas sobre los riesgos que conlleva nuestro regreso a lugares y actividades que eran una parte tan importante de nuestras vidas antes de la pandemia. Debemos tener cuidado de tomar precauciones sensatas en las próximas semanas mientras vacunamos a más personas”.

Sin embargo, señaló un aumento en el número de casos en otras partes del país, principalmente en la costa este, pero dispersos en otras áreas. Señaló que Michigan ahora está viendo 7,000 nuevos casos por día, y la tasa diaria de casos de Pensilvania casi se ha duplicado durante el último mes. 

Es probable que los aumentos se deban en gran parte a variantes de COVID-19 altamente infecciosas, pero Ferrer también señaló que todos los estados que experimentaron aumentos han “relajado significativamente” sus restricciones sobre negocios y otras reuniones.

“Si bien en el pasado, las altas tasas de transmisión en la costa este se han traducido unas semanas después en aumentos en los casos en el condado de Los Ángeles, no creo que este patrón sea inevitable”, dijo Ferrer. “Nuestras circunstancias son diferentes ahora que en el pasado, porque tenemos millones de residentes y trabajadores vacunados ''.

“En Los Ángeles estamos en un buen lugar en este momento, y tenemos la oportunidad de trazar un rumbo diferente al que estamos viendo en otras partes del país. Pero solo podemos hacer esto si lo hacemos juntos. ... Nunca ha habido más pruebas de lo importante que es para nosotros cuidarnos unos a otros, especialmente ahora que muchos de nosotros estamos volviendo al trabajo y a la escuela. Podemos hacer esto, pero podemos hacerlo solo si trabajamos juntos”, agregó Ferrer.

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