ORANGE, California - Un tiroteo en un edificio de oficinas del sur de California dejó a cuatro personas muertas y dos heridas antes de que la policía lesionara al sospechoso, informaron las autoridades. Uno de los fallecidos es un niño.
En una conferencia de prensa el miércoles por la noche, la teniente Jennifer Amat dijo que una de las víctimas, una mujer, resultó herida de bala y se encontraba en estado crítico. El presunto tirador también se encontraba en estado crítico con una herida de bala, pero la policía de Orange dijo que aún no se sabía si la herida de bala fue autoinfligida.
Oficiales respondieron a informes de un tiroteo en un edificio de dos pisos en la cuadra 200 de la Avenida West Lincoln, alrededor de las 5:30 p.m., según el Departamento de Policía de Orange. Al llegar al lugar de los hechos, se escuchaban tiros y encontraron a "múltiples víctimas en el lugar, incluidos muertos".
Se produjo un tiroteo policial en el edificio, que parecía ser un complejo de negocios y oficina. Sin embargo, el departamento luego informó que la situación se había "estabilizado" y que no había ninguna amenaza para el público.
Cuatro personas fueron declaradas muertas en el lugar y otras dos fueron transportadas a hospitales cercanos, según el Despacho de la Autoridad de Bomberos del Condado de Orange. Una de las dos personas llevadas al hospital fue el presunto tirador.
De acuerdo a la teniente Amat, no habían detalles sobre la confrontación, qué pudo haber detonado el ataque ni por qué había un niño en el lugar.
Se recuperó un arma de fuego en el lugar, agregó Amat.
La policía dice que se realizaron disparos en toda la propiedad, arriba y abajo.
Las autoridades no han revelado la edad, el sexo y los nombres de las cuatro víctimas asesinadas.
"Puedo decirte que no hemos tenido un incidente como este en la ciudad
de Orange desde 1997, nuestro tiroteo en Caltrans", dijo Amat en la sesión informativa del miércoles por la noche. "Es una tragedia para las víctimas, sus familias, nuestra comunidad y nuestro departamento de policía … Así que nuestras condolencias, pensamientos y oraciones salen a todos ellos".
Cinco personas murieron y otras dos resultaron heridas en ese tiroteo de 1997 después de que un ex empleado estatal, Arturo Reyes Torres, de 41 años, de Huntington Beach, abriera fuego en las instalaciones de Caltrans cerca de la Calle Batavia y la Avenida Taft. Torres fue abatido a tiros por la policía a poca distancia de la patio de mantenimiento.
Alec Torres, dueño de un negocio en el complejo, dijo que el atacante aparentemente cerró una puerta de entrada y salida y probablemente estaba familiarizado con la propiedad.
"Creo que el tirador estaba familiarizado con el edificio", dijo Torres. "Cerró la puerta principal de la entrada, lo que no permitía que nadie saliera".
Los investigadores confirmaron que la puerta principal de entrada y salida de la propiedad estaba cerrada, lo que obligó a los agentes que respondieron a buscar otra forma de entrar al edificio.
El gobernador de California, Gavin Newsom, reaccionó a la noticia en su cuenta de Twitter: "Horrible y desgarrador. Nuestros corazones están con las familias afectadas por esta terrible tragedia esta noche".
La representante Katie Porter emitió una declaración en respuesta al tiroteo: “Me entristece profundamente los informes de un tiroteo masivo en el condado de Orange, y sigo pensando en las víctimas y sus seres queridos mientras seguimos aprendiendo más. Mi equipo y yo estaremos monitoreando la situación de cerca”.
Hasta el momento, no había más información disponible.
