La ciudad de Long Beach se prepara para desmantelar los campamentos de personas desamparadas que se encuentran instalados en lugares públicos, y quienes se opongan a la medida podrían ser sancionados o pasar tiempo en la cárcel.
Long Beach iniciará el lunes, 19 de agosto, con la medida anunciada por el gobernador Gavin Newsom hace unas semanas, para desalojar de lugares públicos a los campamentos de personas desamparadas.
“Es una ciudad muy bonita, pero desafortunadamente estas personas dan muy mal aspecto”, dijo Claudia Mejía, residente de Long Beach.
Las autoridades señalaron que comenzaron a desmantelar los campamentos que se han detectado, campamentos que representan una amenaza pública, al igual que a personas desamparadas que bloquean la entrada de bibliotecas, parques y playas, medida que apoyan algunos residentes.
“Me parece perfecto que ayuden a estas personas y salgan de esta situación”, dijo Mejía.
Para quienes no acaten la ley, podrían ser arrestos, encarcelados y hasta multados, aunque aún no hay información de cuánto sería la sanción.
De acuerdo con el último recuento, existen en la ciudad unas 3,376 personas sin hogar viviendo en las calles y se ubicaron 3,200 campamentos, informaron funcionarios de obras públicas.
Las autoridades de la ciudad también informaron que aunque a la mayoría de personas desamparadas, se les ha ofrecido un lugar para vivir y muchos lo han rechazado, continuarán ofreciendo refugio para quienes así lo deseen, además se construirá un nuevo albergue y se ofrecerá vivienda con rentas asequibles para quienes cuenten con algunos ingresos.
El concejo de la ciudad mencionó que evaluará en 6 meses los resultados que puedan arrojar esta medida, antes de realizar algunos cambios.
