LOS ÁNGELES - Más de un millón de personas viven a menos de 500 pies de las autopistas en el sur de California.
Múltiples estudios asocian la exposición a químicos y contaminantes provenientes de los vehículos, con enfermedades crónicas como: asma y problemas pulmonares en los menores; partos prematuros para las mujeres embarazadas, enfermedades cardiovasculares, ataques del corazón y demencia en las personas de la tercera edad.
Por 15 años, el profesor Rob McConnell de USC ha estudiado el fenómeno, y los resultados son cada vez más alarmantes. Doctores afirman que la gran mayoría de niños que llegan a las salas de emergencia por ataques de asma, viven a tan solo pasos de las autopistas en el sur de California. Expertos aseguran que la distancia mínima deberían ser por lo menos 500 pies, para que la salud de las personas no corra tanto riesgo. Sin embargo, en Los Ángeles, las partículas tóxicas pueden esparcirse hasta una milla de distancia.
Es un peligro latente, ya que cada vez son más los edificios que se construyen cerca de las autopistas, y muchas personas no tienen ni idea del peligro que corre su salud. Las autoridades en Los Ángeles han pedido un reporte que ayude a implementar nuevas reglas para reducir el riesgo en la salud de aquellos que viven cerca de las carreteras. Organizaciones ambientalistas temen que la salud de las personas continúe empeorando.
Enrique Chiabra investigó algunos casos y habló con expertos y presunta víctimas en la serie: Sin salida, respirando veneno.
Para la prmiera parte sobre la investigación presione aquí.
