LOS ÁNGELES, California - Una madre denunció que una farmacia en el Valle de San Fernando presuntamente le negó la vacuna contra el COVID-19 por ser una inmigrante indocumentada.
El caso provocó la reacción inmediata de funcionarios de salud de California y locales que reiteraron este lunes que todos califican para inocularse sin importar su estatus migratorio.
La directora de salud pública del condado de Los Ángeles, Bárbara Ferrer, asegura que el acuerdo entre farmacias y el gobierno federal para vacunar a la población no requiere que los residentes presenten un número de seguro social o médico para inocularse. Sin embargo, ese no habría sido el caso en esta farmacia.
Humillada y frustrada dice sentirse esta madre, a quien llamaremos Graciela para proteger su identidad, tras acudir a la farmacia Rite Aid a vacunarse contra el COVID-19.
“Muy humillante que le digan esa palabra, lastima mucho”, dijo Graciela. “Hay dosis de vacuna y dijo vámonos y así salimos. Solo los zapatos nos pusimos”.
Graciela relata que a pesar de tener la presión alta todavía no califica para inocularse por tener 55 años, pero su hijo recibió una llamada el sábado de esta farmacia sobre el bulevar Sepulveda en Mission Hills avisando que habían sobrado dosis.
“Me preguntaron por mi seguro social, que si lo llevaba y le dije que no y me preguntaron que si tenía algún seguro y le dije pues que no”, dijo Graciela.
La mujer afirma que al pedirle una identificación con foto presentó su matrícula consular mexicana, pero la empleada de la farmacia presuntamente le exigió una de California.
“En esa conversación fueron tres veces que me dijo que los indocumentados no se la iban a poner”, Graciela agregó.
El hijo de Graciela denunció el incidente en las redes sociales y a través de un comunicado, Rite Aid dijo" “en este caso cometimos un error. Cuando un cliente llega a vacunarse con cita, solicitamos una identificación para confirmar. En circunstancias sin identificación, sugerimos a nuestro personal no rechazar al cliente”.
“Nos llamaron de Rite Aid y fue la directora regional la que nos llamó y nos pidió disculpas por lo que pasó el sábado y querían darle la inyección a mi mamá”, dijo Sebastián Araujo, el hijo de Graciela.
Rite Aid nos dijo que han hablado con el hijo de Graciela en dos ocasiones y esperan que ella regrese a vacunarse.
“Me preocupa que vayan a compartir mi información y tengo miedo”, dijo Graciela.
La directora de salud pública del condado de Los Ángeles, Bárbara Ferrer, señaló que ninguna familia debería pasar por eso y dijo que esta semana hablarían con Rite Aid para asegurarse que no hagan preguntas sobre el estatus migratorio.
“No importa que no tenga seguro médico y si no tiene sus papeles, no tenga miedo”, dijo Hilda Solis, supervisora del condado de Los Ángeles.
El estado de California y el condado vacunan a todos sus residentes sin importar si tienen o no documentos y pueden presentar una matrícula consular o cualquier identificación con foto.
El esposo de Graciela, que si cuenta con una licencia de conducir de California, fue y recibió la vacuna en la misma farmacia que rechazaron a su esposa.
“Es que no queremos que le pase a nadie más -- porque somos millones”, dijo su esposo, Alfredo Araujo.
Para una lista completa de los documentos que puede presentar para vacunarse en el condado de Los Ángeles, ingrese a vacunatelosangeles.com.