Los detectives investigan un intento de robo en una tienda en Norco, pero el dueño sacó una escopeta y comenzó a disparar hacia los ladrones.
NORCO, California - Un dueño de negocio en Norco no dejó que cuatro sospechosos armados se salieran con la suya.
El domingo, 31 de julio, los agentes del alguacil de Norco respondieron a un informe de intento de robo a mano armada en la tienda Norco Market & Liquor, ubicada en la cuadra 800 de la calle 6 en Norco.
De acuerdo a una empleada, los sospechosos entraron gritando y le dijeron a su jefe, quien estaba trabajando esa noche, "que pusiera las manos en el aire", pero no sin antes él decirles que se "detuvieran".
Marnie, empleada de la tienda, dijo que el domingo por la madrugada su jefe estaba observando las cámaras nuevas de seguridad cuando algo no le pareció bien.
"(Mi jefe) se prepara, y ya ha lidiado con estas situaciones antes. Él sabía que esta era una posibilidad de (un robo)", dijo Marnie.
Gracias a las cámaras que acababa de instalar el dueño del negocio, logró ver a cuatro sospechosos armados acercándose a la entrada de la tienda. Los sospechosos tenían las caras cubiertas e ingresaron al negocio apuntando los rifles.
La cámara muestra cómo entró un sospechoso, y cómo otro se sale de una SUV portando otro rifle, pero luego escuchan el único disparo.
"Uno de los sospechosos estaba gritando: 'Me disparó en el brazo! ¡Me disparó en el brazo!'", contó Marnie.
Las imágenes captadas muestran cuando el primer sospechoso corre para escapar, y se puede ver que un tercero casi pierde el viaje y un cuarto está detrás del volante.
Con la ayuda de otra agencia de aplicación de la ley, los sospechosos fueron ubicados en un hospital en la región del sur de California, uno de los cuales sufría una herida de bala consistente con un disparo de escopeta.
Tres sospechosos adicionales también fueron ubicados en el hospital en el vehículo sospechoso, que previamente había sido reportado como robado. También se descubrió que el vehículo, un SUV BMW de color oscuro, contenía numerosas armas de fuego robadas.
El primer sospechoso tiene 23 años y se encontraba en condición crítica, pero estable, con una herida por un disparo de escopeta. Los otros tres sospechosos fueron puestos bajo custodia policial durante esta investigación.
Todos los sospechosos están acusados por robo y cargos de conspiración.
Los investigadores del alguacil de Riverside llaman al empleado de la tienda "un miembro de nuestra comunidad armado legalmente que evitó un crimen violento y garantizó su propia seguridad mientras se enfrentaba a múltiples sospechosos armados".
Mientras tanto, los empleados dicen sentirse protegidos por su jefe.
"Estoy orgullosa de llamarlo mi jefe. Nos hace sentir mejor por estar aquí", dijo Marnie.
