Los padres biológicos de un niño de 10 años que murió bajo el cuidado de sus padres adoptivos en Moreno Valley exigen respuestas después de enterarse de la muerte de su hijo casi un mes después.
Jesse Valbuena y Carol Falcón, padres biológicos de Jesse Valbuena, instalaron un monumento el sábado afuera de la casa del niño de 10 años después de enterarse de la desgarradora noticia hace tres días.
Los padres biológicos vieron a Valbuena por última vez hace tres años cuando perdieron la custodia de él. Falcón dice que el niño de 10 años había estado viviendo con sus padres adoptivos durante cuatro años, junto con un hermano menor.
Durante ese tiempo, no tuvieron contacto con los niños, según Falcón.
“Era un niño feliz. Era un niño muy enérgico que no podía quedarse quieto. Le gustaba divertirse”, dijo Falcón, describiendo a su hijo Jesse, de 10 años.
Los agentes del condado de Riverside respondieron a un informe de un niño que necesitaba ayuda médica el 21 de noviembre en la cuadra 13000 de Malibu Court en Moreno Valley. Las autoridades encontraron a Jesse en “penuria médica” y lo transportaron a un hospital donde murió horas después.
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Las autoridades arrestaron a Alejandra Marín, de 51 años, y a Juan Sánchez Moreno, de 59 años, bajo sospecha de asesinato, tortura y abuso infantil.
“Les fallé. Les fallé, ¿sabes?”, dijo Valbuena conmocionado. “¿Por qué lo tratarían así? Era un buen niño, hombre”.
Para la familia biológica de Jesse, el monumento es una expresión de su dolor y un homenaje a su hijo.
