A partir del primero de agosto, los arriendos pueden subir en todo California. Hasta un 10% para los apartamentos que no tienen control de renta. Por eso esta noche, la ciudad de Pomona aprobó una ordenanza para limitar el alza en esa localidad.
El concejo municipal de Pomona aprobó una ordenanza que protege temporalmente a los inquilinos de alzas excesivas de sus rentas y desalojos.
Organizaciones comunitarias locales manifestaron su satisfacción ya que, a partir del 1 de agosto, una ley en California autorizaba un aumento del alquiler, hasta de un 10%, en las áreas donde no existe control de renta
La alcaldía de Pomona aprobó un alza no mayor del 4%. La ordenanza entrará en vigencia de inmediato y será efectiva por un año.
La votación se llevó a cabo después de varias horas de comentarios públicos.
Algunos inquilinos se quejaron de que tendrán que trabajar más horas o vivir con más personas en una propiedad para suplir los gastos adicionales.
Los dueños de las propiedades también se defendieron, asegurando que los costos para mantener las viviendas han subido, que han perdido dinero durante la pandemia y que temen que los dueños responsables se irán de la ciudad si no pueden subir la renta.
Campaña en contra el aumento
En una ciudad en donde más de 17,000 familias cuentan con un ingreso promedio menor al del 80% de la población, el incremento en las rentas no parecía ser algo que pudiera permitirse.
“Para un inquilino, una madre soltera, padre soltero, eso es la diferencia de gasolina, pañales, y leche para el bebé”, dijo Miranda Meza.
Líderes de Pomona distribuyeron folletos el domingo para que la misma comunidad abogara por una ordenanza temporal urgente, que protegería a los residentes de los incrementos en su renta.
“La unión es la fuerza y si los concejales no miran que estamos unidos, no va a pasar esta ordenanza y los incrementos van a llegar, y van a llegar rápido”, dijo Miranda Meza.
“Si tenemos un concilio, no sabemos cómo va a votar mañana, por eso tenemos la preocupación, por eso hemos estado pasando folletos para que las personas vengan a la cita mañana, que hablen, y digan sus verdades”, agregó.
Con la aprobación de esta ordenanza, Pomona se une a las ciudades de Los Ángeles, Santa Mónica y Oakland, quienes también han adoptado políticas similares.
