El secretario de seguridad nacional Alejandro Mayorkas estuvo el martes en el Centro de Convenciones de Los Ángeles para hablar de los operativos de vigilancia y protección durante el Super Bowl.
Los ojos del país y el mundo estarán concentrados en nuestra región, y la prioridad número uno es garantizar la seguridad durante este gran evento deportivo.
El secretario de seguridad nacional hoy ratificó en una rueda de prensa que no hay información de una amenaza creíble de un posible ataque durante las celebraciones del Super Bowl, pero agentes federales estarán desplegados en toda la región.
“Por aire, tierra y mar, hasta el espacio cibernético, estamos vigilando todo”, señaló Michael Little, oficial del centro regional conjunto de inteligencia de Los Ángeles.
Una muralla de seguridad contará con miles de agentes del Servicio Secreto, del FBI, la policía de Inglewood y de Los Ángeles, además del Departamento del Sheriff de Los Ángeles y el Departamento de Seguridad.
"Estamos listos en Los Ángeles, en Inglewood y en todas partes porque hay tantos profesionales del orden y seguridad pública que han estado trabajando juntos por más de un año”, dijo Eric Garcetti, alcalde de Los Ángeles.
Se espera que unas 150 mil personas lleguen a la región para participar en los eventos del Super Bowl, y según las autoridades, este operativo contará con agentes uniformados y encubiertos.
Una muralla protectora es tanto visible como invisible,
“La trata de personas, el tráfico humano, así como detección de explosivos y armas serán prioridad”, dijo Garcetti.
Las autoridades dijeron que el reto más grande de seguridad para el Super Bowl este año son las grandes dimensiones del estadio SoFi, lo que ha requerido más vigilancia y planeación adicional.
Reiterando el llamado de las agencias del orden advirtieron que está prohibido sobrevolar drones a 30 millas del estadio, y quienes lo hagan podrán enfrentar serias penalidades.