¿Usted aceptaría un iPhone si se lo regalaran? Pues eso creyó estar haciendo un televidente, y se sintió muy afortunado, pero pronto, su alegría se tornó en una pesadilla.
El señor Eliezer estaba feliz, pero tras aceptar el “regalo”, empezaron a llegarle llamadas amenazadoras. Angustiado, contactó a Telemundo 52 Responde.
Eliezer trabaja en la construcción y recientemente, durante un descanso, recibió una llamada que se acababa de ganar un iPhone 14.
Eliezer dijo que solo le pidieron su domicilio, y le dijeron que el dispositivo llegaría en dos semanas, así que se le hizo fácil, y no le dio más importancia. Pero semanas después, en lugar del aparato, lo que recibió fue una preocupante llamada.
“Una abogada en el estado de Washington, me estaba llamando porque yo tenía una demanda en contra mía”, dijo.
Le dijeron que la compañía de envíos intentó entregarle el aparato, pero, al no encontrarlo en casa, el celular se envió a una bodega, y ahora él tenía que pagarlo.
“En ningún momento me dijeron que si no llegaba yo tenía que pagar lo que me están cobrando, que son $900”, dijo el señor Eliezer.
Le aseguraron que tenían grabada su voz, y que si no se presentaba a corte, lo arrestarían.
“Pues me asuste, en el momento ¡me asuste”!
Asegura que entró en pánico.
“Mis hijos, mi esposa, decía yo, como yo estoy metido en un problema, se me van a quedar ellos. Todo pasó por mi mente en ese momento”, dijo Eliezer.
Contó que ya estaba listo para mandar el dinero, por envío electrónico, como se lo exigieron, pero antes, decidió llamar a Telemundo 52 Responde y consultar sobre lo que estaba viviendo, donde el equipo investigó y se pudo confirmar el fraude.
“Ya después que hablé con Telemundo 52 Responde, me sentí tranquilo”, dijo Eliezer.
Es importante recordar que si uno gana un premio, no tiene qué pagar un centavo, además, si no firmó ningún documento comprometiéndose a pagar o a comprar algo, no hay incumplimiento. Y, aun si realmente debe dinero, una compañía jamás le amenazará o presionará para pagar de inmediato y por envío electrónico.
Ya más tranquilo, Eliezer quiso pasar la voz para advertir a mucha gente de que no caigan en el juego de esto, que ya te ganaste un teléfono”. Otra señal de que todo era un fraude, fue que le prohibieron hablar con otras personas y trataron de quedarse con él en el teléfono mientras iba a mandar el dinero.
Recuerde que solo los estafadores trabajan así, pues se están asegurando de que sus víctimas no tengan tiempo de pensar con la cabeza fría.