sun valley

Residentes en Sun Valley denuncian a vecino por acumulación de basura

Sin embargo afirma que poco tiempo después se percataron de la realidad y su sueño se transformó en lo que califica como una auténtica trampa sin salida.

Telemundo

Una familia residente del área de Sun Valley denuncia que su vecino a quien califican como un acumulador compulsivo ha convertido su propiedad en un enorme depósito de chatarra y basura, generando graves problemas sanitarios y de seguridad, sin que hasta el momento las autoridades tomen cartas en el asunto.

Para Elena Malone, la casa que compararon con mucha ilusión hace aproximadamente tres años era la casa de sus sueños. 

“Tu llegas y piensas que este es el país de las maravillas con robles árboles  bugambilias y lugares para cultivar tomates y espacio para que jueguen tus hijos”, dijo Malone.

Sin embargo afirma que poco tiempo después se percataron de la realidad y su sueño se transformó en lo que califica como una auténtica trampa sin salida.

Maple señala que esto obedece a que su vecino ha convertido su propiedad de seis acres en un enorme basurero sin permiso donde acumula más de cien vehículos convertidos en chatarra, además de muebles y electrodomésticos inservibles, así como desechos con materiales peligrosos y contaminantes.

“En cuestión de meses después de que nos mudamos, había señales extrañas fuera de nuestra puerta, ya sea de basura o parafernalia de drogas, baterías de autos quemadas, colillas de cigarrillos, bolsas viejas de ropa mohosa. coches abandonados, llantas, todo tipo de cosas”, dijo Malone. 

Añade que en caso de un incendio o alguna otra emergencia quedaría irremediablemente atrapada en su residencia ubicada sobre la tuna canyon road en Sun Valley,  una área montañosa al noreste del Valle de San Fernando.

“Realmente necesitamos poder llegar y salir de nuestra casa sin tener bloqueada la entrada de automóviles con basura o carros descompuestos esto nos tiene sumamente estresados”, dijo Malone. 

El propietario del basurero ilegal ha sido calificado por sus vecinos y sus propios familiares como un acumulador compulsivo, lo cual afirman consideran como enfermedad mental que se ha agravado con el paso del tiempo. 

Malone dice que ha acudido a múltiples agencias tanto locales como federales incluida la agencia de protección ambiental pero que ninguna les ha dado una respuesta positiva a pesar de que la situación empeora día con día.

“La respuesta de la ciudad ha sido  mínima, y es realmente frustrante porque sentimos que estamos haciendo todo lo posible para mantener a la comunidad segura”, dijo Malone.

Contáctanos