En sus tres años trabajando como guardia de tránsito en la escuela de su hijo en Lakewood, California, Eduardo Villalpando nunca imaginó que potencialmente podría no salir caminando, hasta el día en que fue atropellado por un auto que chocó, lo que le hizo perder parte de su pierna.
"Recuerdo flotar… volar, sin tener el control de mi cuerpo. Luego me desperté en el suelo un segundo después", recordó Eduardo desde su cama de hospital.
El video de vigilancia de un negocio de lavado de autos muestra el momento en que un Dodge Charger que viajaba por Pioneer Street chocó contra una camioneta que giraba a la izquierda en Centralia Street. El poderoso impacto obligó al Dodge a subir por la acera e impactar a Eduardo, quien estaba parado en la esquina durante los últimos minutos de su turno del viernes 1 de diciembre.
"Me golpeó, atravesé una pared de contención del lavado de autos y volé unos 20 pies, aterricé entre un auto y una aspiradora de lavado de autos", narró la víctima.
El video muestra a los empleados del lavado de autos Superfine Auto Spa corriendo hacia la conmoción. Un empleado llamado Víctor agarró un cinturón y le aplicó un torniquete a Eduardo en la pierna mientras otro intentaba consolarlo.
"Es lo que me salvó la vida… mientras esperaba a que llegaran los paramédicos", aseguró el hombre.
"No creemos que seamos héroes, es lo más humano", dijo Nabeel Karadsheh, propietario del negocio de lavado de autos. "Todos entraron en acción e hicieron su parte", agregó.
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Cuando Eduardo salió en una ambulancia, el equipo del lavado de autos consoló a los padres de la víctima, quienes se habían aparecido y no tenían idea de si su hijo iba a estar bien. El video muestra a un empleado ayudando a la madre, y a otro consiguiéndole una silla al padre.
"Le salvaron la vida a mi hijo. No puedo pagar eso con nada", dijo la mamá de Eduardo, María Villalpando, a nuestra estación hermana, NBC4, después de llevarle el almuerzo al personal para darles las gracias una semana después.
Eduardo perdió su pierna izquierda en el choque. Sin embargo, los médicos dijeron que podrá volver a caminar con una prótesis.
"Me amputaron la pierna izquierda. Mi pierna derecha, pudieron salvarla. Ellos (los cirujanos) pusieron tornillos”, describió.
La esposa de Eduardo indicó que la comunidad los está ayudando. Se creó una recaudación de fondos en línea para ayudar a la familia con sus gastos médicos y ya ha se habían conseguido más de $10,000.
“Todos los seguidores, solo queremos dar las gracias”, dijo María. "Tenemos la suerte de que él esté aquí con nosotros y podamos pasar juntos la Navidad y otras festividades".
Momentos antes de que ocurriera el accidente, según dijo Eduardo, había cruzado la calle con su último grupo de niños. Aseguró que no puede evitar estar agradecido.
"Conozco a un par de esos niños, están en la clase de mi hijo. Así que si le tuvo que pasar a alguien, me alegro de que me haya pasado a mí", expresó.
Eduardo y los empleados del lavado de autos dijeron que la intersección de Pioneer y Centralia es extremadamente peligrosa, con personas que van a exceso de velocidad y conducen distraídas.
Un portavoz del Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles dijo que se está investigando el accidente para determinar si alguno de los conductores iba a exceso de velocidad, pero que no se han realizado arrestos. Los involucrados en el accidente están cooperando, se informó.
Cuando se le cuestionó sobre cualquier cambio de seguridad en la intersección, el departamento indicó que había aumentado las patrullas y el control del tráfico cerca de la misma, pero que tendría que reunirse con la ciudad para realizar otras mejoras.
