MÉXICO - "Mi preocupación es saber que no es la vacuna que nos pusieron", dijo uno de los trabajadores de una maquiladora que recibió una supuesta vacuna falsa para protegerlo del COVID-19.
"Es lo único que cabe en mi cabeza, si no es, ¿qué es lo que nos han puesto o qué nos va a poder hacer a nuestra salud?", pregunta el hombre que guarda anonimato por temor a lo que pueda ocurrir si revela su identidad.
El padre de familia trabaja en una maquiladora en el estado de Campeche, en la que hace unos días cientos de empleados fueron presuntamente inmunizados contra el virus.
"Se nos había dicho que era la Sputnik, que no era obligatoria, era opcional", dice". "Era con el objetivo de que ya no hubiera tanto riesgo dentro de la maquiladora".
En ese momento, los obreros quedaron tranquilos de que ya estaban protegidos. Pero sus sospechas sobre la autenticidad del medicamento surgieron luego de que el 17 de marzo decomisaron en esa entidad un cargamento que iba hacia Honduras, con mas de 1,000 frascos de vacunas falsas, que eran exactamente iguales a las que les suministraron.
"Los números que le habían colocado a esta vacuna y sus características no pertenecían a ninguno de los lotes que hasta el momento han ingresado o comprado por el país", admite José Luis Alomía, director de Epidemiología de la secretaría de Salud.
La Fiscalía General de la Repúbica inició una investigación por delitos contra la salud.
Hasta el momento ninguna de las personas que fueron vacunadas en esa empresa ha presentado efectos adversos, pero las autoridades mexicanas ya analizan sancionar a quienes hayan traído al país , distribuido y aplicado las vacunas falsas.
La indagatoria indica que un millonario paquistaní es el dueño del corporativo en cuestión, la cual emitió un comunicado diciendo que con la mejor de las intenciones buscaron obtenerlas para aplicar gratuitamente a sus colaboradores y familiares.