TIJUANA - La fila parecía no tener fin. Desde la noche anterior, cuando cientos de personas acamparon afuera de las sedes de vacunación en Baja California para ser inmunizados con las dosis que donó Estados Unidos a México.
"Lamentablemente perdí a mi mama el año pasado por Covid, entonces para la familia es algo glorioso tener la dosis para nosotros", dijo Alberto Pérez, quien fue vacunado en la frontera.
Javier Zavala y su hermana pernoctaron en la entrada de la Universidad Autónoma en Tijuana.
"Nos tuvimos que estar turnando, pues ni modo de quedarnos dormidos si alguien pasaba o algo", cuenta Zavala.
Mientras Jessica, al no poder dejar de ir a su trabajo, ideó otra estrategia.
"Tuve que arreglar, pagar a alguien para que se quedara aquí a dormir y yo vine ahorita en la mañana, si no, no iba a alcanzar", dice Jessica.
En los seis municipios que conforman Baja California se instalaron 16 centros de vacunación, a los cuales se invitó a acudir a todas las personas mayores de 18 años.
Hasta ahí, a pie o en vehículo, llegó la gente. Algunos lo hicieron en camiones, como Sebastián Rendón y sus compañeros, quienes dicen que por ser tan jóvenes veían lejos que llegara su turno.
"Vamos a estar un poquito más seguros y un poquito menos miedo que nos dé covid y pasarlo a nuestros familiares", dice Rendón.
El gobierno mexicano informó que en los siguientes días habrá diferentes horarios para la atención, para evitar las altas temperaturas.
"Se calcula que la aplicación de la totalidad tenemos una meta de 10 días, y después la campaña se extenderá a todo el norte del país", afirmó Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad federal.
"Después sigue sonora. Queremos vacunar los 39 municipios a la población de la franja fronteriza", dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y así, aseguran, hasta agotar el millón 350,000 vacunas contra el COVID-19 que cedió Estados Unidos a México, en un intento por reabrir pronto su frontera.