Catorce años de exploración pasaron para que la humanidad pudiera conocer la mayor cueva inundada del mundo, de 215.6 millas de longitud, gracias a los buzos del proyecto Gran Acuífero Maya (GAM), quienes además confirmaron el hallazgo del sitio arqueológico sumergido más importante del planeta.
El histórico descubrimiento se registró al encontrase la conexión de los dos sistemas de cuevas inundadas conocidos como Sac Actun (163.4 millas de longitud) y Dos Ojos (32.4 millas) en Tulum, en el caribeño estado mexicano de Quintana Roo (sureste).
Robert Schmittner, responsable de exploración subacuática del GAM, es el buzo espeleólogo alemán que estuvo buscando por 14 años dicha conexión.
Fue la mañana del martes 9 de enero cuando el explorador se sumergió en la cueva Sac Actun, de 393.7 pies de profundidad, sin saber que se encontraba a escasos metros de encontrar la conexión, que también reveló la existencia del río subterráneo más grande de la Tierra hasta ahora explorado.
El buzo encontró en aquel túnel un "hueco" por donde corría un gran flujo de agua, a tan solo 49.2 pies por debajo de la superficie.
"Cuando vi ese hueco, quité una línea de un carrete que traía conmigo", recuerda el explorador, quien dejó que el flujo de agua arrastrara la línea a lo largo de dos metros.
Al día siguiente, el miércoles 10, el buzo ingresó a la cueva Dos Ojos y después de una hora de exploración encontró una grieta donde el extremo de "la línea suelta que había dejado del otro lado estaba bailando". Ese evento le indicó al explorador que su búsqueda de 14 años había terminado.
México
"Fue increíble, fue una sensación que no puedo explicar; no lo podía creer, fue un momento de mucha euforia", comentó Schmittner.
De acuerdo con las normas de la espeleología, tras la conexión descubierta por Schmittner la cueva más grande absorbe a la más pequeña, por lo que el nombre de esta última desaparece y de esta forma el Sistema San Actun es oficialmente la cueva inundada más grande del mundo.
"Nos permite entender el contexto geológico de la Península (de Yucatán)", dijo Guillermo de Anda, director del GAM.
Agregó que el descubrimiento permitirá a los científicos conocer las direcciones de los flujos de agua subterráneos que pasan por los manglares y desembocan en los sistemas de coral del Mar Caribe de México.
Para Schmittner, haber encontrado dicha conexión "es un logro brillante" para la espeleología; sin embargo, este no es el fin de la exploración ya que alrededor de Sac Actun existen otros sistemas de cuevas que podrían conectarse y extenderse hasta 621.4 millas.
"Y estamos iniciando con los estudios hidrogeológicos", señaló De Anda en relación a los trabajos científicos, que contribuirán a generar información sobre el cambio climático.
La exploración de los sistemas de cuevas inundadas en Quintana Roo ha permitido hallar "restos de fauna endémica y osamentas de personas que vivieron antes de la Edad del Hielo y de los primeros pobladores de América", por lo cual es considerada una de las zonas arqueológicas más importantes del país.
El director del GAM señaló que buscarán "hacer propuestas de políticas públicas" para que el Gobierno municipal de Tulum y el estatal puedan tener una participación más directa en la conservación de la zona.
"Creo que debe regularse el control del desarrollo urbano, sobre todo la construcción de hoteles que pueda propiciar la destrucción de selva, y que exista mayor control de desechos sólidos humanos", abundó.
La siguiente fase del proyecto comprende el análisis de la calidad del agua del Sistema Sac Actun, así como el estudio de la biodiversidad que depende directamente del acuífero.
Los científicos y exploradores del GAM esperan que los ciudadanos y las autoridades generan una mayor conciencia para el manejo de las aguas negras y la basura de la región.
Y es que antes de realizar su gran descubrimiento, Schmittner contrajo una infección en la garganta por residuos fecales al estar explorando uno de los cenotes de Tulum, que son una ventana al pasado por los sacrificios humanos que ahí realizaban los antiguos mayas.
Schmittner y sus compañeros del GAM dedicaron la conexión subacuática al explorador Bil Phillips, ex cartógrafo subacuático del proyecto fallecido dos meses antes de que sus amigos confirmaran la existencia del sistema de cuevas inundadas más grande del mundo.
Actualmente el sitio de Sac Actun no está protegido y en él se desarrollan actividades de turismo ecológico, especialmente de submarinismo en alrededor de 200 cenotes, lo que hace aun mayor el reto de conservación para los exploradores y científicos del GAM.