CIUDAD DE MÉXICO - Sin poder controlar el desahogo de sus ojos, recuerda el día en que Fernando, a quien lleva tatuado en su corazón y en el brazo, fue "levantado" (secuestrado) por un vehículo en Guanajuato, y lo encontró en la morgue.
"La necropsia dice que lo torturaron, que lo cercenaron, y la causa de la muerte fue decapitación", detalla Paola Rojas.
Desde entonces la madre de familia quedó incluida en la lista de viudas del narcotráfico, a cual indica que en la última década al menos 46 mil mujeres perdieron a sus parejas debido a la violencia y la inseguridad que generan los grupos delictivos en México.
Las cruces y los datos oficiales indican que este fenómeno se presenta en las entidades donde se disputan el control las organizaciones criminales y provoca que por lo menos cada día 13 mujeres pierdan al sostén de su familia.
Los cárteles de las drogas son señalados como los principales responsables de dejar en el desamparo a las esposas y a los hijos de sus víctimas.
"La mayoría de las viudas tiene nivel educación de primaria o secundaria, la mayoría no tenían actividad previa, eran dependientes y tienen entre 1 y 3 hijos", dice el activista David Saucedo.
Guadalupe Gallardo está viviendo esa pesadilla luego de que su cónyugue murió a manos de delincuentes que operan en el estado donde vive.
“Me dijeron que a mi esposo lo habían encontrado en una fosa”, dice Gallardo.
Ahora ella trabaja sin descanso para sacar adelante a sus dos hijas, llevando a cuestas un doble dolor, ya que su pequeño hijo también falleció semanas después, hundido en la tristeza, asegura, de saber que le arrebataron a su padre.