LA PAZ - Una nueva jornada de enfrentamientos entre agentes y productores de hojas de coca que intentan retomar su sede en La Paz se saldó este viernes con nuevas detenciones y destrozos en una unidad policial, incluida la quema de cinco vehículos.
Decenas de cocaleros marcharon nuevamente en los barrios de Villa El Carmen y Villa Fátima con la intención de llegar hasta la sede de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca), donde también funciona uno de los dos mercados legales autorizados para la venta de coca en el país.
La Policía, que está desplegada en los alrededores del mercado desde que comenzó el conflicto, volvió a frenar el avance de los movilizados con cargas de gases lacrimógenos, ante lo cual los manifestantes respondían lanzando piedras y detonando petardos.
En un momento se generó un incendio en una unidad policial en el lugar conocido como Puente Minasa que alcanzó a cinco vehículos patrulleros y luego fue sofocado por los bomberos.
"La información preliminar es que no hay ninguna persona herida, solo son daños materiales cuantiosos al interior de este módulo policial", dijo el director departamental de Bomberos La Paz, coronel Marco Navia.
UNA DISPUTA ENTRE DOS SECTORES, LA LLAMA QUE INCENDIÓ EL CONFLICTO
El conflicto está centrado en el control de un mercado legal en Villa Fátima donde productores y comerciantes venden la hoja para uso tradicional como el masticado y las infusiones, pero diversos estudios dicen que buena parte de la producción se desvía a la fabricación de cocaína de la que Bolivia es tercer productor mundial después de Colombia y Perú.
El problema se originó en una disputa entre dos sectores de cocaleros identificados como afines al gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) y un tercero del dirigente crítico al Gobierno Armin Lluta por la presidencia de Adepcoca.
El lunes, el dirigente Arnold Alanes se proclamó como principal dirigente de Adepcoca, pese al rechazo de las facciones lideradas por Lluta y Fernando Calle.
Alanes tomó control de la sede y el mercado el martes en la madrugada con apoyo de la Policía que cargó con gases lacrimógenos contra cocaleros del grupo de Lluta que se encontraba en vigilia desde hace meses en el lugar.
CONFLICTO SALPICA AL GOBIERNO
La presidencia de Alanes ha sido avalada por el Gobierno de Luis Arce, lo que generó el rechazo de los sectores cocaleros que critican al dirigente y que aseguran que el Ejecutivo debería mantenerse al margen de un asunto de una institución que no es estatal.
El oficialismo y los partidos de oposición se culpan mutuamente por el conflicto, mientras que el vicepresidente del país, David Choquehuanca, convocó a dialogar a todas las facciones de cocaleros este sábado, por ahora sin hora definida para el encuentro.
En esta jornada surgió una cuarta facción cocalera denominada "Comité de Autodefensa" que exige la renuncia de los tres dirigentes, la elección legítima de un nuevo líder para Adepcoca y que se les permita ingresar al mercado para vender su producción, algo que hasta ahora no han podido hacer.
En la víspera el enfrentamiento entre policías y cocaleros dejó 33 personas arrestadas, de las cuales 27 fueron puestas en libertad el viernes.
Más de cien mil familias viven del cultivo cuyo comercio legal está controlado por los sindicatos de productores. La ley permite el cultivo hasta 22,000 hectáreas, pero la UNODC dijo que la superficie creció hasta 29,400 en 2020, el mayor incremento de los últimos años.