PUERTO PRÍNCIPE - La Policía haitiana anunció este viernes la detención del colombiano Jaime Gersain Mendivelso, el vigésimo sospechoso de haber participado en el asesinato del presidente Jovenel Moïse.
Esta es la tercera detención que se produjo el viernes en relación con el magnicidio, perpetrado el pasado miércoles, con lo que, según las cuentas de la Policía haitiana, todavía quedan cinco sospechosos a la fuga, todos ellos de nacionalidad colombiana.
Según las autoridades haitianas, el comando estaba compuesto por 28 personas, 26 de ellos colombianos y dos estadounidenses de origen haitiano.
Cuatro sospechosos fueron abatidos por la Policía y hay 20 arrestados, entre ellos 18 colombianos y los dos haitianoestadounidenses.
El Gobierno colombiano ha identificado a trece de los supuestos integrantes del comando como militares retirados del servicio entre 2018 y 2020.
La Policía haitiana ha requerido la colaboración de la población para capturar a los fugitivos y entregarlos a la Justicia.
"La colaboración de la población es de suma importancia en la localización de estos matones para que la Policía Nacional pueda tenerlos bajo su control y remitirlos a un tribunal competente para responder por sus actos", afirma un comunicado de la Policía.
El presidente Moïse murió tiroteado en la madrugada del miércoles durante una incursión de un comando de hombres armados en su residencia, un ataque en el que también resultó herida su esposa Martine.
ASÍ FUE EL PRIMER OPERATIVO PARA DAR CON LOS RESPONSABLES DE LA MUERTE DE MOÏSE
“Vamos a llevarlos ante la justicia”, afirmó Charles el jueves en la noche mientras los 17 detenidos permanecían esposados y sentados sobre el piso durante una conferencia de prensa.
El jueves por la noche, el gobierno de Colombia dijo que seis de los sospechosos en Haití eran miembros en retiro del Ejército colombiano, incluidos dos de los muertos. No dieron a conocer sus nombres.
Los presuntos asesinos fueron interceptados por la policía tras un intenso tiroteo en el sector de Pelerin, donde se encuentra la residencia de Moïse, "poco antes de las 6 de la tarde", según adelantó el secretario de Estado de Comunicación, Frantz Exantus, a través de Twitter.
Testigos dijeron que una muchedumbre descubrió a dos sospechosos ocultos tras arbustos en la capital, y que algunas personas agarraron a los hombres por las camisas y los pantalones, los empujaron y los abofetearon.
Las autoridades no han señalado un móvil para el ataque, y sólo han dicho que fue perpetrado por un “grupo altamente entrenado y fuertemente armado”. Los principales partidos de oposición en Haití y la comunidad internacional ya condenaron el magnicidio.
El primer ministro interino, Claude Joseph, subrayó que la situación de seguridad del país está "bajo control" después del asesinato de Moïse.
Asimismo, informó que se realizó el informe forense acerca de la muerte de Moïse y posteriormente, su cadáver fue trasladado a una morgue en la capital.
Con relación al estado de salud de la primera dama, Martine Moïse, también herida en el ataque, aseguró que se encuentra "fuera de peligro", después de haber sido trasladada a un hospital de Miami, en Florida.
Joseph también informó que mantuvo una conversación telefónica con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, con el que conversó sobre la situación política del país.
En concreto, hablaron de la organización de las elecciones presidenciales y legislativas, previstas para el próximo 26 de septiembre, y sobre la oposición.
"Afortunadamente, muchos sectores en la oposición condenaron el asesinato", dijo Joseph, quien horas antes había pedido expresamente a la oposición sumarse a la repulsa del magnicidio.
De todos los sospechosos, el de mayor edad tiene 55 años y el menor, James Solages, tiene 35, de acuerdo con un documento compartido por Mathias Pierre, ministro de elecciones de Haití.
Pierre no facilitó más detalles sobre los antecedentes de Solages. El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo estar al tanto de las informaciones sobre el arresto de haitiano-estadounidenses, pero no las confirmó ni hizo declaraciones.
Solages se describe como un “agente diplomático certificado”, defensor de los niños y político incipiente en un portal de una entidad caritativa que él estableció en el 2019 en Florida para ayudar a residentes.