KIEV, Ucrania — Rusia atacó instalaciones energéticas de Ucrania el martes con una intensa andanada de misiles, que impactaron objetivos en todo el país y causaron apagones generalizados.
Un alto funcionario de inteligencia de Estados Unidos dijo que los misiles alcanzaron Polonia, que es miembro de la OTAN, donde mataron a dos personas.
Una segunda persona confirmó a The Associated Press que presuntos misiles rusos impactaron un sitio en Polonia, a unas 15 millas de la frontera ucraniana.
SEGÚN LOS PRIMEROS REPORTES, HABRÍAN CAUSADO DOS MUERTOS
Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, tuiteó que la agencia había visto reportes de Polonia y estaba trabajando con el gobierno polaco para recopilar más información.
Los ataques dejaron sin electricidad a gran parte de Ucrania.
El portavoz del gobierno polaco, Piotr Mueller, no confirmó de momento la información, pero dijo que altos funcionarios sostenían una reunión debido a una “situación de crisis”.
Los medios polacos reportaron que dos personas fallecieron el martes por la tarde luego de que un proyectil impactó una zona donde se secaba grano en Przewodów, una localidad polaca cercana a la frontera con Ucrania.
La vecina Moldavia también se vio afectada. Reportó apagones masivos luego de que los ataques derribaron una línea eléctrica clave que suministra a la pequeña nación, de acuerdo con un funcionario.
El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy dijo que Rusia lanzó por lo menos 85 misiles, la mayoría de ellos contra instalaciones eléctricas del país, y causó apagones en muchas ciudades.
“Estamos trabajando, restableceremos todo. Sobreviviremos a todo”, prometió el presidente.
Su ministro de Energía, Herman Haluschenko, dijo que el ataque era “otro intento de venganza terrorista” luego de que el Kremlin sufrió reveses militares y diplomáticos. Acusó a Rusia de “tratar de causar el máximo daño a nuestro sistema energético en víspera del invierno”.
El ataque, que causó por lo menos una muerte en un edificio residencial en la capital Kiev, se produjo después de días de euforia en Ucrania provocada por uno de sus éxitos militares más grandes: La recuperación de la ciudad sureña de Kherson.
El presidente ruso Vladimir Putin no ha comentado sobre la retirada de Jersón desde que sus soldados se replegaron ante una ofensiva ucraniana. Pero la impresionante magnitud de los ataques del martes habla por sí sola y deja entrever el enfado del Kremlin.