Ningún padre desea recibir una llamada de la escuela de su hijo para notificarle que está enfermo, pero que no saben que ingiere y que posiblemente es una sustancia prohibida.
Fue lo que ocurrió el lunes 14 de octubre en la Escuela Secundaria Nobel Charter, ubicada en la cuadra 9900 de la avenida Tampa en Northridge, donde cinco estudiantes resultaron intoxicadas tras supuestamente consumir una sustancia prohibida.
Las autoridades creen que posiblemente eran productos comestibles que contenían marihuana.
“Es algo que sucede a diario en nuestras escuelas”, señala Alberto Melena, director ejecutivo de San Fernando Valley Partnership.
Expertos como Melena señalan que se debe al acceso que los menores tienen a drogas que se asemejan a dulces y golosinas, que contienen marihuana como uno de los ingredientes.
“La inocencia es parte del peligro. Para un niño, esto no son drogas, son golosinas, son candies”, señala Melena.
Salud
Una trabajadora escolar coincide en que es un problema mayor y que incluso, la marihuana está llegando a las escuelas primarias.
“He tenido experiencias con niños de quinto grado que van a los baños y comienzan a fumar”, dice la empleada.
La situación causa inquietud entre los padres, especialmente cuando se tratan de varias personas con los mismos efectos.
Los síntomas pueden ser desde vómitos, un ataque de pánico, desmayos, dolor de estómago y psicosis. Muchas veces, las personas ingieren cantidades excesivas.
“Usualmente, es [de] 45 minutos a una hora para sentir los efectos”, dice Melena. “Lo que sucede con los estudiantes [es que] esperan y dicen ‘dame más y resulta en estas emergencias que se están viendo a diario’”.
Cada porción para un adulto debería de contener como máximo diez miligramos de THC. Sin embargo, no siempre ocurre con los productos no regulados.
En el caso ocurrido en la secundaria en Northridge, tres de las cinco estudiantes fueron llevadas al hospital y dos más fueron atendidas y entregadas a sus padres.
El incidente estaba bajo investigación por parte de las autoridades escolares y también la policía escolar. Las autoridades del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles piden a la comunidad que denuncie cualquier irregularidad relacionada con este tipo de incidente.
