Los partidarios de la Medida G del condado de Los Ángeles se adjudicaron la victoria una semana después del día de las elecciones, ya que los votantes apoyaron la ampliación de la junta de supervisores.
Los resultados actualizados a primera hora del martes mostraron que el 51 por ciento de los votantes del condado de Los Ángeles apoyaban la medida y el 49 por ciento votó en contra.
Con la aprobación de los votantes, el condado de Los Ángeles puede modificará sus reglas para aumentar el número total de miembros de la Junta de Supervisores de los cinco actuales a nueve.
El condado también creará un ejecutivo del condado, que esencialmente se convertiría en "el alcalde del condado", que sería seleccionado por los votantes del condado de Los Ángeles, además de establecer una comisión de ética.
"Los habitantes del condado de Los Ángeles han hecho historia al aprobar la Medida G, marcando el comienzo del cambio necesario para un condado de Los Ángeles más eficaz", dijo en un comunicado la presidenta de la Junta de Supervisores, Lindsey Horvath, coautora de la medida. "Ahora tendremos la capacidad de arreglar lo que está roto y ofrecer los resultados con los que cuentan nuestras comunidades, especialmente frente a las amenazas a nuestros residentes más vulnerables de la próxima administración federal. "A través de este cambio histórico, abordaremos los problemas más urgentes que enfrentan los angelinos con mayor urgencia y responsabilidad, y crearemos un gobierno más ético y representativo, adecuado para el siglo XXI".
La Medida G, que fue apoyada por tres de los supervisores actuales, Janice Hahn, Hilda Solis y Horvath, fue propuesta para hacer que la Junta de Supervisores sea más diversa, ya que más miembros representarán al segundo condado más grande del país con políticas diversas que podrían servir y representar a diferentes áreas.
Para cumplir con la Medida G, Los Ángeles tendrá que votar y seleccionar a su propio ejecutivo del condado, que servirá como "alcalde del condado".
Los partidarios de la Medida G habían dicho que el actual director ejecutivo del condado de Los Ángeles, que es designado, carece de responsabilidad y transparencia. Al elegir al ejecutivo del condado, los votantes pueden exigirle responsabilidades al funcionario electo por cuestiones críticas, como el proceso de elaboración del presupuesto del condado.
Pero aún queda por ver si la Medida G creará una división entre los supervisores, ya que otros dos miembros, Holly Mitchell y Kathryn Barger, se opusieron a la propuesta, diciendo que es demasiado costosa y que otorga demasiado poder a una sola persona.
Esta historia apareció por primera vez en la estación hermana de Telemundo 52, NBCLA. Click here to read this story in English.